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26 CAROLINA PEREZ CIRUELOS máximos representantes, ya en nuestro siglo, destacan el Padre Laberthon- niére, Teilhard de Chardin, Souriau, Berger, Lavelle, La Senne, Jankélé- vitch, Alquié, etc. Blondel toma como punto de llegada lo espiritual. Henry Duméry se refiere al pensamiento blondeliano con el calificativo de «intelectualismo integral» 5 pero, lejos de significar el pensamiento puro y fragmentado, denota el espíritu en su más perfecta unidad. La filosofía blondeliana pue­ de ser considerada como una filosofía de lo espiritual 6. Y, por último, tenemos la polémica suscitada en Francia en torno al modernismo. El modernismo representa, dentro del Catolicismo, una alter­ nativa a la tradición y uno de los temas en los que mejor se patentiza esta ruptura con el pasado es el de la inmanencia. El problema de la inmanencia remite a las relaciones entre las causas primeras y las causas segundas. El Ser superior puede ser considerado como un ser personal que se hace presente dentro de cada individuo concreto. Gracias a la acción la inma­ nencia se convierte en la condición de la trascendencia. Dios es, al mismo tiempo, superior e interior: para contemplarlo basta con descubrir su pre­ sencia en nosotros7. El método de inmanencia significa, para Blondel, el mejor antídoto contra los empirismos materialistas y los idealismos abstractos. Podemos afirmar al respecto que Maurice Blondel ha dado un «giro copernicano» a la filosofía católica8. Podemos pasar a explicar, presentadas las circunstancias que generaron su nacimiento, una filosofía centrada en el tema del hombre. 1. L a pregunta por e l destino d el hombre , raíz de la antro po log ía DE LA ACCIÓN DE BLONDEL Maurice Blondel intenta desarrollar una filosofía del hombre y para el hombre en la que, además de todas las consecuencias de carácter teológico, moral u ontologico que de ella se puedan extraer, la base sobre la que aquélla se construya sea muy sólida. Tal cimiento sólo puede ser la proble­ mática del hombre, la problemática de la vida. 5. Cfr. H. DUMERY, La philosophie de l’ación. Essai sur l ’intellectualisme blondélien , Paris Aubier-Montaigne 1948. 6. Para J. M. Isasi «Blondel es ante todo un metafisico del espíritu». Véase J. M. ISASI, Maurice Blondel. Una rigurosa Filosofía de la Religión, Bilbao, Mensajero 1982, 42. 7. «Para buscar a Dios no hace falta romperse la cabeza sino el corazón» (LJ Action, 375). 8. Véase E. COLOMER, La nueva filosofía del conocimiento y de la acción , en «Pensamien­ to» 16 (1959) 326.