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154 SATURNINO ARA que va a evangelizar, sino que, «siguiendo a Jesús pobre, abraza a todos los afligidos por la debilidad humana, más aún, reconoce en los pobres y en los que sufren la imagen de su Fundador pobre y paciente, se esfuerza en aliviar sus necesidades y pretende servir en ellos a Cristo. Recibe en su seno a los pecadores y busca siempre su purificación constante...» (LG 8). La evangelización de los pobres, y de todos desde esta preferencia, marca el estilo misionero de la Iglesia particular. Por eso no asume sin más la cultura que pretende misionar, sino que, acogiendo al hombre en su raí­ ces, pretende sanar los mecanismos que cierran a esas culturas sobre sí mismas y sobre sus intereses dominantes y, por eso, lejos de ser un regio­ nalismo eclesiástico, es una encarnación crucificada. La Iglesia de Corinto no es la Iglesia, «de» Corinto (identificación propietaria), ni la Iglesia «coyunturalmente en» Corinto, sino la que «está» allí clavada y libre al mismo tiempo, encarnando y trascendiendo a Corinto. La pertenencia a la Iglesia libera al cristiano de una pertenencia cultural cerrada, para encar­ narle de nuevo y abrir vertical y horizontalmente la familia o etnia desde la que fue llamado» 10. 1.2. Rasgos o características de la parroquia actual Ya hemos indicado que la parroquia es una estructura, un tanto arcai­ ca, pero a pesar de todo es un modelo de agregación social, donde ni es todo el cura, porque la parroquia la componen los feligreses y, entre estos, hay muchos que se sienten comprometidos con la misma, ni puede ser un coto cerrado, porque es una célula dentro de la Iglesia local o particular. La descripción de los rasgos o características de la parroquia actual nos podría llevar tiempo y ocuparnos muchas páginas. Vamos a describirlas, como de paso, y sin detenernos, entre otras razones, porque sus peculiari­ dades están ya descritas en los trabajos citados y en los que iremos citando en nuestra reflexión. Queremos limitarnos a señalar los rasgos más desta­ cados que afectan directamente a nuestro propósito de estudio de la insti­ tución parroquial y la vida religiosa, en la peculiaridad de franciscano- capuchina. 1.3. La parroquia, lugar e institución evangelizadora Es ésta una exigencia del mundo actual secularizado y alejado de la Iglesia y de la práctica cristiana. La parroquia no puede contentarse con 10 . l b i d 106 - 107 .

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