PS_NyG_1992v039n001p0007_0093

CONTEMPLACION Y SEGUIMIENTO DE CRISTO POBRE Y CRUCIFICADO 67 O. González de Cardedal llama a Buenaventura Cultor Trinitatis : «El pensador trinitario de la Edad Media, no tanto porque haya creado una teología nueva, cuanto por la síntesis que en su persona se ha logrado de teoría y vida, de especulación sistemática y de vivencia personal»251. El Lignum vitae como árbol de la vida expresa perfectamente la Trini­ dad creadora y vivificadora del universo, representa el signo unificador de Dios y de las creaturas e indica el itinerario del retorno de las creaturas a la fuente de la vida trinitaria. De esta forma Buenaventura une la pasión a la Trinidad: «Les declaró el misterio de la Trinidad , predijo los abatimien­ tos de la pasión» (12). En la I Questio Disputata De Mysterio Trinitatis Buenaventura propone la cruz como la unidad de los tres libros, de la creación, de la Escritura y de la vida, que reflejan la imagen de Cristo, el árbol de la vida. De esta forma podemos decir que la cruz es la mayor revelación trinitaria252. La Trinidad, que se dona en la apertura de los brazos de la cruz, en los cuales Cristo experimenta la fuerza de la mano de Dios, que lo guía y lo atrae hacia su corazón de Padre. La cruz es el signo de la ternura divina, hacia la creatura pobre y ciega. Es la revelación, en la pobreza de un signo de muerte, de la vida que no muere. Las invocaciones trinitarias dominan toda su obra: «Acompáñale tú también fielmente; y ya regenerado en él, escudriña su s secretos , a fin de que, después de haber contemplado a orillas del Jordán en la voz al Padre, en la carne al Hijo, en la paloma al Espíritu Santo, y héchosete patente el cielo de la Trinidad, seas levantado hasta Dios» (9). La espiritualidad bonaventuriana se caracteriza por sucesivas jornadas, cuya estación última es Dios253. Nadie sube a Dios sino por una escala, por un camino y un medio, Cristo254. Pasar de este mundo con Cristo y por Cristo al Padre. Todas las cosas se reducen por Cristo al Padre, plenitud fontal, cuya expansión comunicativa explica el misterio trinitario. Cristo es el centro, el árbol de la vida plantado en medio del paraíso255. Como a Francisco le basta un solo libro: Cristo crucificado. 251. O. GONZÁLEZ DE CARDEDAL, Misterio trinitario y existencia humana. Estudio históri­ co y teológico en torno a san Buenaventura, Madrid 1966, 4. Con este título de su tesis doctoral este autor estudia ampliamente el carácter trinitariodel pensamientode Buenaventura. 252. Cfr. Hex. 3, 19; C. DEL ZOTTO, La teologíadellimagine in San Bonaventura , Vicen­ za 1977, 239. 253. Cfr. hin. prol. 3. 254. Cfr. hin. 4, 2. 255. Cfr. Plant., 8.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz