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CONTEMPLACION Y SEGUIMIENTO DE CRISTO POBRE Y CRUCIFICADO 45 En Buenaventura no se pueden tomar aisladamente algunos de sus es­ critos o de sus opúsculos místicos, sino que hay que tener en cuenta todo su sistema teológico y filosófico. Aunque no ha compuesto una Summa del propio sistema como santo Tomás, sí que ha hecho una síntesis personal donde poder encuadrar todos sus distintos estilos y escritos. Su mística no se entiende sin su teología y filosofía, y viceversa. Buenaventura quiere una ciencia que sea sabiduría, una ciencia que se encuentre en un solo libro y un solo libro que se resuma en una sola palabra. Y ese libro-palabra es Cristo, es el Verbum crucifixum. Fruto de todo esto es el Lignum vitae. Del encuentro vital entre piedad y teología nace el Lignum vitae. Esta unidad es la originalidad de Buenaventura, que no encontramos en Bernardo y la tradición anterior140. Estrictamente, no pertenece a la obra teórica, de especulación teológi­ ca; pero aborda sus temas fundamentales: el cristocentrismo, la doctrina del De triplici via , el planteamiento franciscano de la imitación de Cristo, y del conocimiento con amor. Por lo tanto, no está aislada en la produc­ ción bonaventuriana, sino que pertenece a un diseño muy orgánico de toda su ob ra141. Su diseño es claramente teológico: recorre el círculo com­ pleto del misterio de la encarnación, cuyo epicentro es la cruz de Cristo, su humanidad crucificada. Se da un doble movimiento: de la preexistencia a la encarnación-pasión y de ahí hacia la resurrección y glorificación; de la gloria a la cruz y de la cruz a la gloria. La cruz es el elemento presente de forma continua y que no abandona en ningún momento el desarrollo de la obra. Este movimien­ to centrado en la cruz, que domina la teología de fondo del Lignum vitae , es el que proponemos como esquema teológico del mismo. Esquema teológico que viene a coincidir con el que ya veíamos en la estructura tripartita de la obra: misterios del origen y vida de Jesús; miste­ rios de la pasión; misterios de la glorificación. Y los frutos de la gracia que nacían de estos mismos misterios marcarán el mismo camino del discípulo hacia la cruz y, desde la cruz, a la glorificación con Cristo. tura corre entonces una cortina que cubre el centro de su biblioteca, y bajo la misma aparece la imagen de Jesús crucificado, mientras responde: «éste es, Tomás, el libro predilecto en que me inspiro». 140. «El amor se desarrolla paralelo al dogma, la inteligencia pone todos los recursos al servicio del corazón; se da la fusión de ciencia y piedad, que celebra de acuerdo la santa humanidad de Cristo»: Cfr. S. DU CHAMBON FEUGEROLLES, La devotión á la humanité du Christo , Lyon 1932, 158. 141. Cfr. R. LAZZARINI, S. Bonaventura, en Grande antología filosófica , Milano 1954, t. IV, 825: «Los opúsculos ascético-místicos constituyen el significado íntimo de la obra bonaventuriana».

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