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LA NOVELISTICA ITALIANA DURANTE EL VEINTENIO FASCISTA 383 El mundo que Vittorini presenta en dicha novela está poblado por gentes que se debaten en la miseria de una desesperada situación donde, a falta de pan, se comen naranjas para matar el hambre, donde la malaria y la tuberculosis no pueden atajarse a tiempo porque faltan los medios necesarios para acudir al médico. Todo esto, frente a la fanfarronada fascis­ ta, produce un sentimiento desesperanzador mientras las autoridades se despreocupan por completo de la situación. De esta falta de esperanza nace la rebelión contra la insostenible situa­ ción creada por el gobierno, que se traduce en huelgas y hasta en lucha armada. Nada puede cambiar si no se aúnan los esfuerzos individuales y se lucha, no por uno mismo, por el «mondo tanto offeso». Hay que atacar el mal en su raíz, una vez individuado , atacar al fascismo y preparar las armas contra él. Vittorini entiende por fascismo no sólo la forma dictatorial del gobier­ no italiano sino todas las dictaduras existentes en el mundo, todas las for­ mas de opresión que ahogan la libertad de individuo. De este modo la situación descrita en Conversazione in Sicilia podría transferirse a cualquier lugar donde se dieran estas o parecidas circunstancias. Elio Vittorini fue un propulsor de la lucha armada contra el fascismo y promovió el empeño de una organización del comunismo y de la izquierda contra la dictadura. Es éste un mérito que le reconocen muchos críticos, entre ellos, los marxistas, naturalmente. Incluimos en este apartado a Cesare Pavese por haber sido encarcelado y condenado por un tribunal fascista por culpas insignificantes90. Su primera novela, Paesi tuoi , despertó algunas polémicas. Entre los críticos hubo quienes vieron en esta obra una continuación de la novela verista91 y le consideraron «scrittore neorealista» 92y quienes, como Salina- ri, pusieron muchas objeciones a esta denominación93. Lo cierto es que, Paesi tuoi , es una imagen real del campo de su re­ gión, de sus tipos y de sus problemas. Las descripciones de Pavese son muy objetivas y, difícilmente, dejan traslucir las emociones personales del autor aunque constituyen la propia visión del agro piamontés y de su pro­ blemática provinciana. No es fácil encontrar en esta novela ni en la que lleva por título II carcere (historia de un exiliado y por ello reminiscencia del exilio de Pavese) un empeño explícitamente político. Sin embargo, estando su autor en ambientes antifascistas y teniendo en cuenta su aver- 90. A. R o sa, o . c., 152. 91. G . G ra n a , Profili e letture dei contemporanei , Milano 1962, 154. 92. C. SALINARI, Preludio e fine del realismo in Italia , Napoli 1967, 87-97. 93. D. FERNÁNDEZ, L’échecde Pavese , París 1967, 130-131. Apud. J. HEISTEIN, o . c.} 133.