PS_NyG_1991v038n003p0351_0386

LA NOVELISTICA ITALIANA DURANTE EL VEINTENIO FASCISTA 373 es un modo de pensar que se ocupa más del contenido que de los proble­ mas inherentes a la formación de un arte literario en particular60. Un mundo inverosímil aparece también en las obras de Dino Buzzati. Desde su primera novela corta emplea elementos colocados en una atmós­ fera de fantasía. El héroe es un ser solitario errante, sin más compañía que sus propios remordimientos. En esta obra, Buzzati introduce la problemá­ tica de la purificación de las propias culpas, del fatalismo, de la redención y conversión del individuo61. El mundo real y el fantasmagórico se entrela­ zan en la narración Sacrilegio. Domenico, el protagonista niño, deja de confesar un pecado, lo que despierta en él un fuerte remordimiento. En sueños, se ve delante del supremo Juez y defendido ante El por un viejo criado que muere por salvarlo. Al despertar del sueño, Domenico se entera de que Pascual, su criado, ha muerto verdaderamente. El hecho verisímil de la muerte de un criado resulta entremezclado con visiones del juicio universal del todo metafísicas. La obra más importante de Buzzati es su novela II deserto dei Tartari , publicada en 1940. En esta novela, como en las de Massimo Bontempelli, el principal elemento es el tiempo que transcurre inexorablemente. No encontramos división cronológica, ni pasado ni presente: «Ieri e l’altro ieri erano uguali, egli non avrebbe più saputo distinguierli, un fatto di tre giorni o di venti finiva per sembrargli ugualmente lontano». «L ’esis­ tenza di Drogo... si era come fermata. La stessa giornata, con le identiche cose, si era ripetuta centinaia di volte senza fare un passo innanzi. Il fiume del tempo passava sopra la fortezza... ma su Drogo passava in vano; non era riuscito ad agganciarlo nella sua fuga»62. Buzzati continuará usando los mismos argumentos en sus obras poste­ riores: siempre surgirá el conflicto entre el hombre y su destino. Nos quedarían por citar dos autores, creadores de una visión satírica de las cosas, que hicieron de la sátira el instrumento literario capaz de alejarlos de la auténtica realidad. Uno de ellos, del que ya hemos tenido ocasión de hablar en el apartado dedicado a la novela de inspiración fascista, es Vitalino Brancati. Después de su ruptura con el fascismo comenzó a publicar obras que se distinguen de las que publicó en el período precedente. Ya no hay en ellas alabanzas al partido sino una visión satírica y hasta grotesca de la realidad italiana. 60. Cfr. A. SERONI, Avventure e mito in Bontempelli, en Ragioni critiche, Firenze 1944, 283. 61. Cfr. G. PULLINI, II romanzo italiano del dopoguerra, Bologna 1963. 62. D. B uzzati , Il deserto dei Tartari, Verona 1970, 99-100.