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316 JOSE LUIS RODRIGUEZ MOLINERO distinguirse el uno de los otros. Supone el fenómeno de la caída del ser sí mismo propio en lo impropio del uno o del se cotidiano, del Man. Respecto del análisis ontológico-fundamental del «ser en» del ser en el mundo, hemos de señalar, ya de entrada, que Heidegger trata de mostrar explícitamente los estados de ánimo en conexión con, o en el contexto de, la temática existencial del «ser en». Es decir, en la mostración fenomeno­ logica de los estados de ánimo, o del modo de hallarse, se observa como un tránsito temático de la esencial forma de ser del «ser ahí»: el «ser en», al modo de ser, al carácter de ser del mismo: el hallarse19. Preguntemos entonces: ¿Cuál es la estructura original oconstitución ontologica del «ser en »? ¿Qué significa o quiere decir « ser en »? Heidegger, tras indicar que: «nos inclinamos a comprender el ‘ser en’ en el sentido de ‘ser en el mundo’ dado que inmediatamente completamos aquella expresión en el sentido de la última» 20, explícita la relación catego- rial implícita en el «en» del ser en que «mienta la recíproca relación de ser de dos entes extendidos ‘en’ el espacio por respecto a un lugar en tal espacio»21, por ejemplo: el agua en el vaso, el pupitre en el aula, el vestido en el armario, etc. Esos entes, que son unos en otros, tienen la misma forma de ser: la del ser«ante los ojos». No tienen la forma de ser del ser «ahí». Tal relación categorial revela una interioridad de «lo ante los ojos» a «lo ante los ojos». Frente a esa relación categorial, Heidegger trata de ver la diferencia ontologica del «ser en» como «existenciario». Por lo que el análisis ontoló- gico-fundamental del «ser en» del ser en el mundo no manifiesta «el ser ‘ante los ojos' de una cosa corpórea (el cuerpo humano) ‘en’ un ‘ante los ojos’, sino que es una estructura del ser del ‘ser ahf; es un existenciario»22. El «en», en este sentido existenciario, procede de: «habitar en», «dete­ nerse en», «frecuentar algo», «cultivar algo», «estar familiarizado con algo» (vertraut mit), etc. Heidegger, como tantas veces ocurre en él, gusta de jugar aquí con los términos y así pasa de la forma verbal alemana bin = so y , a la preposición de la misma lengua bei = cabe a. Por ello, la determinación existenciaria del «ser en» es la siguiente: Ser como sum —no como cogito—; ser, como infinitivo del ‘yo soy’, es decir, como existenciario, significa « habitar cabe a »..., «ser familiarizado con»... 19. Cfr. Sein und Zeit , 132 (trad. esp., 148). 20. Cfr. Sein und Zeit , 53-54 (trad. esp., 66). 21. Cfr. Sein und Zeit , 53-54 (trad. esp., 66). 22. Cfr. Sein und Zeit, loe. cit.

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