PS_NyG_1991v038n001p0153_0187

HEIDEGGER EN LA FILOSOFIA ESPAÑOLA 157 en la filosofía clásica y en la tradición encarnada por Brentano que le acercaba, más si cabe, a un planteamiento como el de Heidegger. Cuando se cierra la universidad en 1929 y Ortega termina su curso ¿Qué es filoso­ fía ? en un teatro, Zubiri está en Alemania y sigue estudios con Husserl y con Heidegger en Friburgo. El impacto de Heidegger sobre Zubiri fue amplísimo y sus conocimiento de primera mano le pusieron en una situa­ ción privilegiada, aunque luego haré ver que desde el comienzo no oculta discrepancias con el filósofo alemán. Esto explica perfectamente que, a su regreso a Madrid, Zubiri fuese considerado por todos (incluido Ortega) como el experto en Heidegger e incluso a un joven inteligente que por entonces entraba en esa élite intelec­ tual se le aparecía como una especie de embajador intelectual de Heideg­ ger ante los filósofos madrileños. El testimonio de J. Gaos resulta tan ins­ tructivo como desmesurado: «Zubiri acababa de volver de estudiar dos años en Friburgo con Heidegger. Se rumoreaba que había llegado a ser el discípulo predilecto de Heidegger [no hay ningún indicio de cosa semejan­ te]; que hasta había acompañado a este en sus excursiones de alpinista por la Selva Negra; y no dejé de ver pruebas de ello como el retrato dedicado por Heidegger a Zubiri. En todo caso, Zubiri venía entusiasmado, no sólo de Heidegger, sino con Heidegger, que no es precisamente lo mismo. Mi Zubiri de la fenomenología, al que había dejado de ver el par de años de mi profesorado en Zaragoza y de sus estudios en Friburgo, me lo encontra­ ba hecho un Zubiri del existencialismo» 10. Lo que menos importa ahora es la exactitud de este relato, pues del especial «entusiasmo» de Zubiri por Heidegger hablaremos después; lo que se saca en claro de este relato es que hacia 1930 todo filósofo que se preciase tenía ya a Heidegger entre sus asignaturas obligatorias y sorprendentemente había nublado otros nombres que unos años antes parecían consagrados. Es también Zubiri quien prepara la primera traducción de Heidegger. En la revista Cruz y Raya aparece en 1933 la famosa lección inaugural de Heidegger. ¿Qué es metafísica?, un plato quizá algo fuerte para inaugurar la lista de traducciones de Heidegger. La traducción de Zubiri ha sido y es objeto de múltiples reimpresiones y es una traducción en la que toma una vía original para solucionar los graves problemas que a todo traductor plantea ese difícil texto. Más sorprendente todavía es que, en un acto de temeridad juvenil, Gaos comience en 1933 a tomar notas, discutidas con Zubiri, para una traducción al español de Sein und Zeit; esas notas desapa- 10. J. G aos , Confesiones profesionales, en Obras completas, t. XVII (México, Universi­ dad Nacional Autónoma 1982), pp. 63-64.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz