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262 FELIPE F. RAMOS Pablo quiere corregir al escribir a los corintios. El amor bendice, es signo de bendición; la avaricia explota al hermano a través de una medida escasa y que, además, deja obligado al hermano a estar agradecido. Citamos más arriba como excepción a este significado común el texto de 2 Cor 2, 11: para no dejar que Satanás saque «partido de esto» (= pleo- nektezomen, en el sentido de «sacar partido» o explotar). Esto ocurriría si no se da el perdón dentro de la comunidad, porque llevaría a la destruc­ ción de la comunión existente entre Pablo y sus fieles125. VI. LOS CATÁLOGOS COMO TALES Sería excesivamente prolijo tratarlos todos uno tras otro. Como método de trabajo hemos optado por tomar como base y ejemplo uno de ellos, el de Gálatas: En cuanto a las consecuencias de esos desordenados apetitos, son bien conocidos: fornicación, impuresa, desenfreno, idolatría, hechicería, ene­ mistades, discordias, rivalidad, ira, egoísmo, disensiones, cismas, envidias (homicidios), borracheras, orgías y cosas semejantes. Los que hacen tales cosas —os lo repito ahora, como os lo dife antes — no herederán el reino de Dios (Gal 5, 19-21). La enumeración que hemos hecho puede clasificarse en cuatro bloques o grupos: en el primero son mencionados tres pecados concretos: «fornica­ ción, impureza, desenfreno»; el segundo consta de dos: «idolatría, hechice­ ría»; pertenecen al tercero ocho: «enemistades, discordias, rivalidad, ira, egoísmo, disensiones, cismas, envidias» y el cuarto comprende dos, que se refieren a la destemplanza: «borracheras y orgías» 126. 6.1. Primer grupo Entre los pecados de lujuria destaca el expresado mediante la palabra porneia , que hace referencia a cualquier acto sexual ilegítimo. Puede apli­ carse incluso a la infidelidad matrimonial de la mujer, en cuyo caso es sinónimo de adulterio; también al homosexualismo (Rom 1, 26s), aunque en la especificación no se hable de porneia , sino de ponería , que es la «maldad» en un sentido más amplio; y a la degradación máxima en este 125. TWNT VI, 273. 126. Otra posible división distinguiría también cuatro apartados con los siguientes deno­ minadores comunes: 1.° los pecados de lujuria; 2.° las faltas de orden religioso; 3.° violacio­ nes de la caridad; 4.° vicios de intemperancia (E. DE WiTT BURTON, The Epistle to the Galatians , Edinburg 1956, 304; H. SCHLIER, Der Brief an die Galater , Gottingen 1965, 262).

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