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ROGER BACON: SUS IDEAS EXEGETICAS 317 (errores descriptivos aparentes en la Biblia, que no se compaginan con verdades científicas o filosóficas debidamente comprobadas). Pongamos algunos ejemplos. Ya indicamos que conocer que el Jordán es un río es un requisito para entender la frase «pasamos el Jordán», pues resul­ taría absurdo que se llamara Jordán a una nube o un animal. Incluso la frase tendría algún sentido supuesto que se creyera, equivocadamen­ te, que el Jordán es un monte, pues un monte puede «pasarse» en el sentido de escalarse, bordearse, etc., pero no «atravesarse» como un río, distinciones que no se presentan en el hebreo. No obstante, la sig­ nificación quedaría equivocada y por tanto no se habría «comprendido» el texto. Comprender es, pues, entender en su totalidad y sin equivo­ cación el contenido cognoscitivo de una frase. El sentido literal se in­ tegra, desde luego, con esta comprensión, pero además, con el cono­ cimiento exhaustivo de los elementos que explican esa frase. El ejem­ plo, anteriormente referido, del día de la muerte de Cristo lo ilustra bien. El texto puede comprenderse, en una primera lectura, sin saber qué día exactamente murió, pero para tener el sentido literal del rela­ to de la pasión tenemos que poder armonizar y explicar los datos apa­ rentemente contradictorios de Sinópticos y Juan. La mayoría de los aportes que dan las ciencias positivas al sentido literal son este tipo de precisiones que completan el contenido descrip- tivo-cognoscitivo de las frases bíblicas. Lo integran, por tanto, los con­ tenidos que en los estudios actuales comprenden la Geografía Bíblica, la Arqueología Bíblica y, para los principiantes, las Introducciones a la exégesis. La importancia de estos complementos es, por una parte, aumentar nuestros conocimientos acerca de los sucesos de la historia sagrada; por otra, ello permite detectar más fácilmente y con menos probabilidad de error, los sentidos espirituales del texto. Bacon se mues­ tra tan escéptico sobre la posibilidad de acertar, por pura intuición, en el sentido espiritual, que toda ayuda proveniente del sentido literal le parece necesaria e insustituible: Sextum peccatum [de los estudios teológicos] est longe gravius ómni­ bus, et posset dividí in dúo peccata maxima; unum est, quod sensus literalis habet quasi infinitas falsitates et alibi dubitationes intolera- biles, ita quod non potest sciri veritas; ex quo sequitur novum pecca­ tum, quod tune sensus spiritualis habebit eamdem falsitatem et dubi- tationem (Opus Minus: Brewer, 349). 9

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