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SIGNIFICADO Y REFERENCIA 115 Como criterio general, para señalar esta función «índice» del lenguaje pue­ de decirse que se da siempre que el signo lingüístico A se conecta con un significado B, de modo que la aparición de A presuponga o implique la presencia o existencia de B. A veces, nuestra función indicativa del lenguaje humano adquiere una dimensión «sintomática» que afecta al hablante. Es «síntoma» de su estado o situación individual y particular. Así, una expresión pronunciada con tartamudeo, en una determinada circunstancia, puede ser «síntoma» de la embriaguez alcohólica del que la dice. Se tienen en cuenta, entonces, facto­ res extralingüísticos: tono de voz, acento, palabra perteneciente a una con­ creta jerga profesional o a un preciso dialecto, etc. La exposición expresiva del ser del hombre no se reduce, en el lengua­ je, a la mera aprehensión comunitaria de la realidad mediante el logos común al Yo y al Tú. O a la declaración enunciativa de dicha aprehensión. En ocasiones, la palabra humana intenta con su poder seductor, indirecta o directamente, influir en el comportamiento del que la escucha. Una pro­ posición como «me gusta este queso de Cabrales», dicha por alguien a un amigo, está invitando indirectamente a éste a probar aquel queso y a afir­ mar también que le gusta. La forma imperativa de los verbos, los mandatos subyacentes en muchas oraciones, son casos del propósito orientador de otras conductas, aunque no se prevea con claridad cuáles vayan a ser. Algunas concepciones filosóficas analíticas de la Etica se mueven en este lenguaje prescriptivo en el que aparece esta función lingüística apelativa. La naturaleza verbal del hombre, pues, expresa la patencia de su ser ante los otros hombres y capta la realidad, el universo todo, haciéndole aparecer y representándolo en su decir. Se da, así, una intercomunicación dialógica humana que, para ser tal, exige «significar». Y este significar no es otra cosa que desarrollo derivado del signo icónico y del sentido único que constituye los entes y que se fundamenta en la Palabra dicha en los orígenes. En el hombre, la signitividad icónica reviste, además, una gama amplia de acepciones, debido a que su ser se constituye como respuesta libre a la llamada de la Palabra que le saca de la nihilidad silenciosa. II. TEORIAS EXPLICATIVAS DEL SIGNIFICADO: LA REFERENCIA Desde que Platón en su Cratilo cuestionó el origen del significado, dos posiciones semánticas se han enfrentado en el correr de los siglos. Estas dos posiciones se denominan naturalismo y convencionalismo. El natura-

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