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28 GERMAN ZAMORA versidad española de aquel momento, hay que recordar, ante todo, lo indi­ cado líneas antes, es decir, que el plan granadino de 1775 otorgaba a la filosofía el rango de facultad mayor, aunque no eliminara por completo su índole ancilar. Dando por sentado que nadie podría matricularse «de filósofo», sin haber aprobado los estudios de lenguas clásicas y humanidades en el modo propuesto, para evitar así «los abusos de la sofistería y la barbarie», el plan se extiende acerca de las materias que se han de enseñar, su reestructura­ ción, los textos más recomendables y, en fin, la orientación general del filosofar. En cuanto a la materia del curso filosófico, los viejos estatutos universi­ tarios prescribían el aprendizaje de la lógica, física-metafísica y ética, de cuño aristotélico, y —para obtener el grado de licenciado en artes— de las matemáticas, cuyo estudio íntegro abarcaba el de la aritmética, geometría, perspectiva, música y esfera. Textos básicos eran «los ocho libros de los Físicos, los De coelo et mundo, los De generatione et corruptiones, los de Meteoros, los De anima y los que se llaman Parva naturalia, los seis de metafísica y otros tantos de filosofía moral». La duración previsible del estudio se extendía a seis años. Los nuevos legisladores mantenían, en algunos aspectos, la letra marco de aquellos estatutos y, en muy pocos, su espíritu. En consonancia con lo primero, asignan, para el curso filosófico com­ pleto, cinco cátedras e igual número de años, aunque reconociendo que no serán unívocamente obligatorias para acceder a las facultades subsiguien­ tes. Dichas cátedras serían las de lógica parva y magna, con la crítica e historia de la filosofía; la de metafísica general y particular y pneumatolo- gía; la I de física o de física general; la II de física, o de física experimental; y la de ética natural. Se apartarán de la antigua letra, que consideran muerta, al matizar el contenido y la dirección que han de dominar. Con ello creen seguir fieles al espíritu de los estatutos —y en realidad lo que invocan y siguen es el más genuino «Zeitgeist» de la hora. Vale la pena transcribir íntegramente el pasaje: «Cátedras y objetos de este curso »La filosofía se divide en tres partes: racional, natural y moral; la pri­ mera es la lógica, la segunda es la metafísica y física, y la tercera la ética o moral.

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