PS_NyG_1988v035n001p0065_0157
124 JOSE BULLON HERNANDEZ En estos textos aparece reflejado el deseo y afán por una nueva forma de sociedad frente a los existentes. Se habla de promover una democracia que sea mucho más perfecta que la actual. A pesar de to dos los esfuerzos que se han hecho, aún no se han lagrado los grandes deseos de la humanidad. Por esto precisamente, la Octogésima A dve niens no se conforma con pedir o exigir una serie de correcciones en los modelos actuales, sino que impulsa a que pueda elaborarse uno di verso y nuevo. Ya se vislumbra de alguna manera y muy en general el estilo que ha de irse formando: más proximidad, relaciones más humanas, con quista de mayor libertad y responsabilidad. Por esto conviene ver ya cómo es este modelo de sociedad. 2.1.1. Lo indefinible Lo primero que hay que decir es que se trata de una fcrma de so ciedad difícil de definir. La carta apostólica habla del capitalismo y del socialismo definiéndolos de una forma más o menos clara. Sin embar go, el nuevo estilo de sociedad no viene clarificado. Nos es difícil de terminar las líneas de fuerza, aunque tenemos que intentar esclarecer las. No podemos afirmar categóricamente que la sociedad participativa venga expresada en unos conceptos comprehendidos en una brevedad de palabras. Como puede observarse en este texto aparece un dato, en aquel otro o en el de más allá tal matiz, pero nunca se nos presenta el núcleo esencial que define todo lo demás. Y esto es así porque el modelo no es aún realidad sino proyecto115. La sociedad de participa ción no es todavía un hecho sino una posibilidad y, como tal, no puede entrar aún dentro de lo definible; si de alguna forma puede ser defini da habría que hacerlo con palabras de «orovecto posible». No tenemos de la vida humana: economía, política...; y con un significado más reducido: expresar la opinión; así podemos apreciarlo en Pío XII, La Solemnitá 17: Doc trina Pontificia. Documentos sociales, Madrid 1964, 871-872; Benignitas (Radio- mensaje 24-XII-1944) 7, 14, 12, 874, 875 y 883. J uan XXIII, Mater et Magistra, 33, 53-56 y 73-74. Posiblemente hay también una aproximación entre la Pacem in Terris y Octogésima Adveniens, bien que en ésta se señala una manera con creta, en cuanto a la comprehensión participativa: Fomentar la prosperidad de todo el mundo, buscando la convivencia basada en la justicia, el amor y la libertad. Cfr. Pacem in Terris 147 y 164; la Octogésima Adveniens indica tomar parte en la elaboración de decisiones y en su ejecución: Cfr. Octogési ma Adveniens 47, en lo social, político y económico por parte de todo el cuer po social a través de los grupos, y no sólo de los políticos: n. 25. 115. OA 25. en o. c., 509-510.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz