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FUTURO DESDE LA OCTOGESIMA ADVENIENS 77 1.3. Antropología y sociedad ofrecidas por el capitalismo Con los datos aportados anteriormente no resulta difícil poder pre­ sentar la antropología y forma societaria que origina el capitalismo. Por más que intente aparecer como forma salvadora del hombre, no puede admitirse por una serie de razones. El hombre capitalista sigue siendo el hombre solitario. Si era fácil distinguir esta faceta en la primera etapa de su nacimiento en la que cada persona gozaba de absoluta libertad para realizar aquello que ella quisiera sin que nadie la pusiera trabas y así sentirse segura en el tro­ no de la realización; por más que el capitalismo actual proclame la sociabilidad en lo económico o político, no por ello deja de crear una clase de individuo solitario. La carta apostólica no duda en señalar el tipo de hombre que está presente en la sociedad capitalista. Sólo ante los problemas, sin capa­ cidad para enfrentarse a los mismos, dominado por el abatimiento, la tristeza y desesperación: «El hombre experimenta una nueva soledad, no ya de cara a una na­ turaleza que hostil le ha costado siglos dominar, sino en medio de una muchedumbre anónima que le rodea y dentro de la cual se siente ex­ traño» 19. El liberalismo ha dado origen a un individuo totalmente autóno­ mo y libre que puede moverse a su antojo y que, si se une a los demás es no por necesidad original, sino para conseguir sus fines. Un indivi­ duo libre para buscar la utilidad, conquistar el poder y dominar sobre los inferiores: «El cristiano no apoya la ideología liberal, que cree exaltar la libertad individual sustrayéndola a toda limitación, estimulándola a la búsque­ da exclusiva del interés y el poder, y considerando las solidaridades sociales como consecuencias más o menos automáticas de iniciativas individuales y no ya como fin y motivo primario del valor de la orga­ nización» 20. 19. OA 10, en o. c., 500. 20. OA 26, en o. c., 510. Resaltamos la fuerza del texto con la cita en latín. «Ñeque christianus likeralium, qui audiunt, favet doctrinis, quae personae li- bertatem extollere affirmant, eam a quavis regula seiungentes eamque exsti- mulantes ad rerum utilitatem et potentiam tantummodo conquirendas, ac