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RESPONSABILIDAD MORAL ENTRE LA GUERRA Y I.A PAZ 337 paz, como la vivencia más auténticamente humana, es siempre una di­ mensión relacional que afecta al hombre mismo al afectar a los pies so­ bre los que se asiente el trípode de su propia existencia: los otros, lo otro y el absolutamente Otro. La paz dinámica con los demás hombres, con las cosas y con el mundo del Absoluto, motiva a la vez y refleja la paz del hombre consigo mismo, como encuentro reconciliado con su hondura más verdadera y significativa. Si durante milenios los hombres no han sido capaces de encontrar a la violencia una alternativa válida y eficaz a la hora de dirimir sus di­ ferencias, parece llegada la hora de poder establecer en esta «aldea pla­ netaria» un talante y unas estructuras que hagan posible la convivencia y la colaboración. Ello es ciertamente posible desde una planificación técn ica , para la cual ya no nos falta el utillaje. Pero eso ha de ser facti­ ble desde los propósitos y el esfuerzo ético. La paz se nos presenta hoy no sólo como un ideal utópico: se nos impone como un valor moral ineludible. La paz es la exigencia y la con­ dición no ya cel progreso, sino de la misma supervivencia. 1.2. La paz, un valor amenazado La instrucción pastoral C on stru ctores d e la paz que, tras dos años de lenta elaboración, la Comisión Permanente del Episcopado Español firmaba el 20 de febrero de 1986, no deja de mirar con ojos realistas a la situación conflictiva de nuestro mundo, que trasciende ciertamente laproblemática coyuntural sobre el referendum acerca de la pertenen­ cia de España en la OTAN, que por aquellos días encendía las más vi­ vas polémicas en el país e inevitablemente iba a deformar las disposi­ ciones de acogida o de rechazo ante el documento episcopal4. 1. Recordaban los obispos la división del mundo en dos bloqu es an tagón icos que se presentan empujados por dos ideologías con preten­ siones hegemónicas y difícilmente conciliables. Podrían a este respecto haber evocado las palabras del documento de trabajo del Sínodo de los Obispos de 1983: «En el marco de las naciones o de grupos de naciones, todos conocen la oposición entre el Este y el Oeste y, más recientemente, entre el 4. Para el estudio pastoral de este documento, puede utilizarse la obra de G. C astaño y M. M artín , Por el camino de la paz, Madrid, SM, 1986. C fr. A . A lvarez B olado , A propósito de 'Constructores de la p a z en Sal Terrae 74 (1986) 223-30, así como ed editorial Constructores de la paz, en Razón y Fe 213 (1986) 34143, n. monográfico de Corintios XIII 39-40 (1986).

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