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2 2 2 ALFONSO PEREZ DE LABORDA filosóficos insolubles. Por eso nuestro pensador ya no será monista, sino dualista: hay el 'intelecto’ y hay infinitas 'homeomerías’. La 'mez­ cla’ originaria es una masa indefinida compuesta por las infinitas 'ho- meomerías’, que se neutralizan las unas a las otras; de esta manera, esa mezcla, siendo de una diversidad infinita se nos aparece como una sola naturaleza. El Nous es principio de movimiento de esa mezcla ori­ ginaria. Es él quien hace que «en la separación de lo indefinido se unen entre sí las cosas afines y, puesto que en el todo había oro, se produce el oro, y puesto que había tierra, se produce la tierra; y de un modo semejante sucede con cada una de las demás cosas, no porque nazcan sino porque estaban ya de antemano contenidas». Esa separación y esa diferenciación se efectúan por el Nous, por medio del cual «nacen los mundos y la naturaleza de las demás cosas». Hay así una sola «causa del movimiento y del llegar a ser»: el Nous210. ¿Cómo realiza esta tarea el Nous? Por medio de un movimiento circular, ya lo hemos leído en el texto de Hipólito transcrito más arri­ ba. Fragmentos considerados del propio Anaxágoras nos lo enseñan: «y el Nous dispuso la rotación del conjunto, de manera que rotase des­ de el comienzo». Aunque, es verdad, el Nous «conoció todas las cosas que se entremezclaban y las que se separaban y las que se dispersaban», y es de todas ellas la más «liviana», no por eso deja de ser 'cosa’, aun­ que no se mezcle con las demás cosas y sea autónomo e infinito211. Como dice Cappelletti, «cuando se analiza la manera en que el Nous ordena la mezcla primordial y la transforma en Cosmos, se llega a la conclusión de que su papel es, ante todo, el de un motor mecánico» 212. Lo primero que realiza el Nous es aquel 'movimiento circular’ al que se refería Hipólito, la 'rotación del conjunto’ que nos transmite Sim­ plicio. Bien lo entendió así Aristóteles también cuando critica a Ana­ xágoras, o mejor lo entiende a su modo, como si el Nous fuera un pre­ cedente de su motor inmóvil que mueve sin moverse é l 213. Sin embar­ go, sabemos que el Nous sí que se mueve, nos lo dice un fragmento que es considerado del propio Anaxágoras: «y después que el Nous 210. S im p lic io , F ís . 27, 2, en A. J. C a p p e lle tti, o . c ., 33-34, en G II 688 y 702 (DK 59 A 41). 211. S im p lic io , F ís . 162, 24 y 156, 13, en A. J. C a p p e lle tti, o . c ., 151^152 (DK 59 B 12); también en G II 698, 703, 805 y 847. Lo que Cappelletti traduce por 'liviana' (XeircÓTTj; , Conrado Eggers Lan traduce por 'sutil'. 212. A. J. C a p p e lle tti, o. c ., 245. 213. A r is t ó t e le s , Física 256b, en A . J. C a p p e lle tti, o . c ., 43, en G II 704 (DK 59 A 56).

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