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EL HOMBRE Y LA HISTORIA DE EDUARDO NICOL 481 La importancia que tiene la «situación vital» para el pensamiento antropológico de E. Nicol obliga a un detenido análisis de la misma 18°. En la ponencia presentada al l . er Congreso Inter-Americano de Fi­ losofía celebrado en la Universidad de Yale, que ya hemos citado an­ teriormente, E. Nicol hubo de haber un esfuerzo de síntesis para pre­ sentar claramente su pensamiento. Y en dicha ponencia nos ofrece esta nítida definición de la situación «vital»: «La situación vital es una relación. Como en toda relación, des­ cubrimos en ella tres factores o componentes: los dos términos de la relación y la relación misma. Aquí los términos de la relación son el sujeto o agente y la circunstancia; es decir, el factor personal y el transpersonal. En cuanto a la relación entre ambos se cualifica co­ mo una relación vital. Pero los tres factores constituyen una unidad, y no es posible discernir el uno de los otros, sino por abstracción mental: en la realidad se dan siempre los tres juntos» 181. Vamos, pues a considerar los distintos factores que están integrados en la «situación vital»: 1) El sujeto o agente; 2) La circunstancia o lo transpersonal; 3) La relación entre ambos. A la hora de explicar estos factores, E. Nicol insiste, sobre todo, en el tercer punto. Pues, aunque trate brevemente los otros dos, es la relación el factor fundamental. Sin embargo, en el comienzo de esta exposición, es preciso tener en cuenta la dificultad que supone dividir, seccionar, una experiencia psicológica marcada y constituida por su intrínseca unidad. Ya en las palabras anteriores, el mismo E. Nicol señalaba que sólo era posible hacer esa separación o división mediante una abstracción mental. La unidad que llena e invade toda situación vital en consecuencia de ser una experiencia psicológica, no general, sino personal, y, por 180. La «situación vital» es llamada por E. Nicol «concepto funcional psicológico» (PSV 94), indicando con esta definición que se trata de algo coherente, unitario, armó­ nico, que opera conforme a una ley (Cf. VH 35). En otro lugar (PSV 102) la llama también «categoría». Pero aclarando que tal palabra no ha de guardar relación con «es­ quemas formales, rígidos y estáticos» aplicables en el conocimiento científico. Si se denomina a la «situación vital» categoría ha de entenderse siempre que se habla de una realidad concreta, dotada de los rasgos de la vida misma. Además, siempre se trataría de una «categoría» de alcance más reducido que cuando hablamos de las formas del ser o del conocer en general. 181. VH 199.

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