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430 MANUEL GONZALEZ GARCIA Con tal descubrimiento entraba en crisis de manera particular, la pretendida ambición de la filosofía de poseer un carácter absoluto. Como consecuencia de esta situación, surgieron algunos sistemas filosóficos como actitudes compensatorias de la crisis. Tal es el caso del pragmatismo o del subjetivismo 15 y las formas escépticas del vita­ lismo y el perspectivismo16. c) La Ciencia En la ciencia, en general, las diversas teorías, las leyes, los descu­ brimientos, sucediéndose cronológicamente, aumentaban los conoci­ mientos. La paulatina eliminación del error iba consolidando el edifi­ cio de la ciencia construido sobre una amplia base empírica y con caracteres de apodicticidad. Kant había precisado los fundamentos de esta ciencia sobre la deducción trascendental de las categorías y los juicios sintéticos a prio- ri. Ello suponía, de un lado, que la razón humana era inalterable y uniforme y, de otro, que las formas posibles de juicio eran inmutables, así como los conceptos categoriales que se deducían trascendentalmen­ te de ellas. La ciencia, pues, se fundamentaba en operaciones legítimas del entendimiento que construía una verdad uniforme e inmutable, delimitada en sus contornos por el error. Pero también la ciencia entró en crisis con el descubrimiento de la historicidad. Esta no puede ser concebida como una simple «crónica histórica». Si así fuera, la historicidad no afectaría estrictamente a la verdad de la ciencia, pues tal «crónica histórica» deja fuera a la verdad científica. Una historicidad de tal tipo reflejaría la acumulación de datos científicos, la liberación paulatina del error y una mejora pro­ gresiva en la observación. Esta clase de historicidad no crea problema alguno a la verdad de las ciencias 17. gress of Philosophy, Québec 1967, 94; Verdad y Expresión, en Revue Internationale de Philosopbie 16 (1962) 3-39; ME 18-23; PC 31-32; VH 300-301; Diálogo de filosofía entre el autor y el crítico, en Filosofía y Letras 22 (1951) 159-161; IH 16-17, 21; etc. 15. Cf. Verdad y Expresión, en Revue Internationale de Philosopbie 16 (1962) 29; Diánoia y diálogo. Veinte años después, en Diánoia 1974, 7. 16. En todas estas corrientes filosóficas se afirma, de una u otra manera, quelarela­ ción verdad-tiempo ha sumido a la primera en un proceso irracional y, por ello, la ha colocado «irremisiblemente en la confusión de las arbitrariedades subjetivas, las conve­ niencias vitales primarias, la mutación de las perspectivas, o el azar de las ocurrencias personales» (PC 53). 17. PC 30. Algunas ideas sobre la historicidad y la verdad de las ciencias pueden verse en Verdad y Expresión, en Revue Internationale de Philosopbie 16 (1962) 3-39.

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