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210 ARSENIO GUTIERREZ DE RUCANDIO influencia, la que determina unos usos comunes, más allá de la lengua y de la filiación eclesial. Otra de las conclusiones es la de que no se partió de una unidad en las fórmulas litúrgicas, ni siquiera en las cosas que parecen esen­ ciales, como podía ser el caso de los relatos de la institución eucaris­ tica o el de las palabras en la administración del bautismo. El proceso fue más bien desde la diversidad hacia la unidad. No hubo libros, ni oraciones ni cánticos o textos fijados desde el principio. Las primeras comunidades se mantuvieron fieles a lo esencial dentro de una gran variedad y libertad en los usos litúrgicos, según gustan de resaltar algunos santos Padres de la Iglesia 105. c) Los criterios de la renovación litúrgica Paralelo a este esfuerzo de investigación histórico-crítica, se venía haciendo otro de renovación litúrgica de tipo espiritual y teológico. Se hicieron familiares los nombres de las abadías de Solesmes, Beuron, Maredsous, Mont César, Maria Laach, Klosterneubourg, Chevetogne, etc., así como el de hombres, centros y revistas que sería prolijo enu­ merar, pero que suscitaron un enorme interés por la renovación, no sólo de lo que Guardini llamaba «el espíritu de la liturgia», sino tam­ bién de la letra y de la lengua, que se quería recuperar viva para el hombre de nuestro tiempo 106. El Vaticano II abordó el tema de la liturgia en su primer docu­ mento oficial. Aunque todavía un tanto tímidamente, se trazaron los criterios de la renovación: Los textos y los ritos deben alimentar la fe de los fieles y favore­ cer su participación activa y plena (Cf. Const. Sacrosantum Concilium, 105. Cf., por ejemplo, los esfuerzos infructuosos de P. G a g in , L’anaphore apostolique et ses témoines, Paris 1919. A finales del siglo pasado llegó a ha­ blarse de la «una,^ sancta, catholica et apostolica liturgia». Cf. J. A. J u n g - m ann , o. c., 61. La tesis de la diversidad original es sustentada por A. Baums- tark, B. Botte, J. A. Jungmann. Cf. este último sobre la «norma unificado- ra», que no fue escrita (p. 60). Del mismo autor La Liturgie des premiers siècles jusq'á Vépoque de Gregoire le Grand, Paris 1962. 106. Cf. Dicc. de Teol. Interdisc., o. c., voi. I, 74 y la bibliografía de la página 82. Más reciente en AA.VV., Liturgia opera divina e umana. Studi sulla riforma liturgica offerti a S. E. Mons. Anibaie Bugnini in occasione dei suo 10 compleanno, a cura di Pierre Jounel, Reiner Kaczynski, Gottardo Pas- qualetti, Roma 1982. Entre nosotros han circulado dos grandes manuales, el de A. G. M a r tim o r t, citado, y el de M. R ig h e t t i, Historia de la liturgia, 3 vols., Madrid 1955-1956.

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