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DE LA ANAFORA DE LA «TRADICION APOSTOLICA» 199 Bendición hacia el cielo : Bendice a las vientos del cielo y a las lluvias y a los frutos de la tierra del presente año según tu gracia. Y de­ rrama abundantemente la alegría y el gozo sobre la faz de la tierra y confírmanos en tu paz. Bendición sobre la tierra : Concede tu gracia a los amados príncipes cristianos, reunidos en esta Iglesia santa, a todos, a cada uno, se­ gún su nombre; ante los reyes poderosos, oh Señor nuestro, con­ fórtalos. Da el descanso a las almas de nuestros padres y herma­ nos que durmieron; descansaron en la fe verdadera. Bendición sobre el altar : Y bendice sobre los que cuidan asiduamente del incienso, de las ofrendas, del vino, del crisma, del aceite, de las velas, de los libros de lectura y del mantel del altar. Cristo, Dios nuestro, recompénsalos en la Jerusalén celeste. Y a todos los que se han reunido con nosotros, para pedir misericordia, oh Cris­ to Dios nuestro, perdónalos con bondad ante tu trono terrible. Con­ suela toda alma oprimida, a las que están en las cárceles y a las que están encadenadas en amarga esclavitud o en el destierro o en cautividad. Oh Dios nuestro, líbralos en la multitud de tu miseri­ cordia. Oh maestro mío Jesucristo. De todos aquellos que nos enco­ mendaron que nos acordáramos de ellos, Cristo, Dios nuestro, acuér­ date en tu reino celeste, y de mí mismo, pecador, siervo tuyo, acuér­ date. Bendición sobre el pueblo : Oh Señor, salva a tu pueblo y bendice a tu heredad, apaciéntalos y alégralos para siempre. Guárdalos en la fe recta, en honor y en gloria, todos los días de su vida; y consti- túyelos en la caridad que supera toda obra y en la paz que está sobre todo entendimiento; por la intercesión y la imprecación que por nosotros hace la Señora de todos nosotros, santa e inmaculada María, Madre de Dios, y las tres grandes luminarias Miguel, Ga­ briel y Rafael y por los cuatro animales incorpóreos y los veinti­ cuatro sacerdotes del cielo; y nuestros santos padres patriarcas de santa y excelsa memoria, Abraham, Isaac y Jacob; y san Juan Bautista: y los ciento cuarenta y cuatro mil niños inocentes; y nuestros santos príncipes los apóstoles y san Marcos evangelista, apóstol y mártir; y los setenta y dos discípulos y los tres jóvenes santos; y san Esteban primer diácono y san Georgio y san Teodo­ ro y san Mercurio y san Minas y todos los mártires; y el patriarca, padre nuestro y justo abba Antonio y el justo abba Pablo y nues­ tros dos padres (nombre) Macarios y nuestros padres abuna Bisai y abuna Juan, nuestros padres abuna Moisés y abuna abba Paco- mio, y todos los revestidos de la cruz, justos y probos, y el ángel