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54 ARRATE URANGA MENDIZABAL la cultura8. Y cultura significa para él todo el recorrido histórico de la humanidad en el que el lenguaje es eje fundamental. La compren­ sión, el conocimiento, la filosofía, el pensar o como quiera llamarse, se basa siempre en el lenguaje. Sin embargo, el lenguaje no es más que el recuerdo, la suma de los recuerdos de la humanidad9. F. Mauthner, al igual que L. Wittgenstein, no identifica el lenguaje con la realidad, aunque la represente. La expresión humana sólo es un modo de representación, sólo es un espejo que, como tal, a veces refleja deterioradamente y conduce a múltiples confusiones y dificul­ tades, cuando se intenta adquirir un conocimiento verdadero. La crítica del lenguaje, en Mauthner, tiene el mismo significado que crítica del conocimiento, ya que son dos conceptos estrechamente unidos. Con todo, el lenguaje en sí no es nada real. El lenguaje no es más que un conjunto de signos que representan algo. Lo único ma­ terial son los signos. De este modo, el lenguaje es una suerte de re­ presentación o una totalidad gráfica cuya base son los signos perci­ bidos. Por otra parte, el lenguajje es un esquema, una estructura que no puede ofrecernos la misma realidad ni penetrar en ella, porque sola­ mente es un instrumento útil y no una realidad en sí. «Si queremos comparar el lenguaje, que no siendo una realidad, es fuerza y obra, con algo semejante, pensamos en los dibujos, que por su negrura des­ tacan sobre el papel blanco y no son más que signos, sin embargo; realidad física (como pequeñas partículas de grafito) y real y efectiva­ mente sólo medios de representaciones, signos, imágenes antropomor­ fas» 10. La idea de «dibujo», aplicada al lenguaje, evoca en seguida la idea de Bild, utilizada por L. Wittgenstein. F. Mauthner afirma, igualmente, que jamás será posible obtener conocimiento alguno por medio de una operación o trabajo o tiranía de la palabra, porque el lenguaje no es más que una totalidad gráfica y esquemática basada en los sonidos percibidos por nuestros antece­ sores hasta hoy. Y, así, «sería mentecato el individuo que quisiera hacer un viaje de investigación por Africa, no sobre el terreno, sino sobre un mapa» n. El mapa, el dibujo, es como la lengua. Y, al hablar de la utilidad del lenguaje, delmismo modo queWittgenstein, distin­ gue un lenguaje eficaz —el de loscientíficos— y un lenguaje única- 8. F. M a u th n e r, o . c ., 292. 9. F. M a u th n e r, o . c ., 293 y ss. 10. F. M a u th n e r, o . c ., 88. 11. Ibid.

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