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10 ENRIQUE RIVERA se haya escrito, es insuficiente8. Con mayor motivo otras varias que cito en mis estudios. Y también el mismo A. Nygren al presentar la segunda edición de su o b ra9. Ahora bien; ante este status questionis nadie se maravillará de que me haya embarcado en la obra que estoy redactando y que llevará el mismo título de esta lección. Quizá sea algo extraño que en una ultima lectio se presente un programa. Sin embargo, es lo que quisiera hacer brevemente. No cierto para desarrollarlo como profesor titular, sino para escribirlo como profesor «jubilado». Entendido este asendereado vocablo en su virginal sentido: «lleno de júbilo». Mi planteamiento inicial era muy amplio, pues intentaba exponer en una misma obra el amor impersonal y el amor personal. El famoso verso de Dante, el último de la Divina Comedia: « L ’amor che move il solé e Valtre stelle» me forzaba a abordar en serio el amor imperso­ nal o amor cósmico. Es tan grato a un pensador cristiano sentir inva­ dido todo el cosmos por el amor. Pero advertí que el tema del amor impersonal está pidiendo otra obra. Sobre todo si se tiene en cuenta que frente a la unidad armónica de las fuerzas espirituales del amor, tal como las percibe el pensador cristiano, ha habido desórdenes y con­ fusiones. El pensador alemán Th. Haecker afirma que este desorden se manifiesta en los tres enunciados siguientes: «El sentimiento lo es todo» (Fausto); «el pensar lo es todo» (el idealismo alemán, Hegel); «la voluntad lo es todo» (Schopenhauer, Nietzsche)10. Durante el otoño pasado me ocupé en exponer esta vertiente del amor impersonal. Pero en la Navidad advertí y me advirtieron que había para rato y que me era imprescindible enfrentarme cuanto antes con el amor personal. 8. J. L otz , Die Stufen der Liebe. Eros Philia Agape , Frankfurt 1971. 9. Al presentar A. Nygren la segunda edición da un elenco de autores que han abordado posteriormente a él este tema del contraste entre eros y agape. Indudablemente la obra ha tenido, y sigue teniendo, un gran eco, tanto en los medios culturales protestantes como católicos. Para una visión histórica del gran tema juzgo que hasta ahora el mejor estudio es el de Robert G. H azo . The Idea of Love (Concepts in western thougth series... Institute for Philosophical Research), N. Y.-Washington, London, Frederick A. Praeger 1967, 5-488 (selecta «bibliography»: 479-485). 10. Th. H aecker , Schöpfer und Schöpfung, Düsseldorf 1934, 135 ss. Un re­ sumen de esta vision de Th. Haecker da el teólogo M. S chm aus , Teología dog- mática, Madrid, Rialp 1960, t. I, 421.

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