PS_NyG_1984v031n003p0511_0525

«HEIDEGGER Y LA NECESIDAD DE LA FILOSOFIA» 523 Kommende bleibt». En la retorsión todavía oculta de este camino del pensar ese rememorativo pensar-en (pensar primigenio) hace caso al avenirse del ser y la verdad 26. La ocasión para el pensar verdadero, para el pensar descubridor consiste en mostrar la necesidad memorable de posiciones últimas expresas e incompren- didas. El hecho de que, en este pensar, una necesidad provisional sólo pueda ser suprimida por medio de una necesidad más fundamental, le quita a nuestro esfuerzo todo optimismo activo. Que este pensar que trasciende hacia los co­ mienzos, toma radicalmente en serio la historicidad de toda filosofía posicional, porque ella exige la necesidad de una constante superación de la principialidad alcanzada una vez, no es ninguna consecuencia accidental de nuestro encuen­ tro con Heidegger. Frente a esto las posiciones tradicionales de la historia de la filosofía y sus filosofías con su autocomprensión de presentar posiciones de fundamentación definitivas, contradicen la historicidad de nuestro pensar fun­ damental. III. I n d ic a c io n e s para un a nu eva dir ec c ió n d el p e n sa r Quiero recoger algunas indicaciones principiantes en todo sentido que mues­ tran en qué dirección podría Heidegger dirigir una reflexión. Se debe intentar pensar adentrándose en lo que ha quedado impensado con el planteo expreso de la pregunta por el ser. Esto es : un comprender expreso de lo que todavía se ha dejado sin considerar necesariamente con la pregunta por el ser que está todavía pendiente. «Mirar» por un revelar descubridor se dice en griego: «theo- rein»! En la siguiente dirección visual va mi proyecto de teoría: facticidad y fe­ nómeno 27. La pregunta de Leibniz: «¿Por qué es el ente y no más bien la nada?», no es suficientemente primitiva. Antes tiene que ser cuestionado lo que se acepta desde siempre como evidente, cuando semejantes preguntas por el porqué ini­ cian amplios caminos del pensar. ¿Qué se acepta sin más cuando se parte de que en general «algo» se muestra o no se muestra? ¿Cuál es el sentido de la facticidad y de «algo» como fenómeno dado de conciencia? ¿Cómo y qué «algo» ha de entenderse por facticidad y fenómeno si en cada pregunta de sentido real ya se diferencia por lo menos entre los fenómenos en general y aquel fenó­ meno que se distingue justo porque a él le son dados otros fenómenos? La pregunta por el sentido de una donación de conciencia que desde siempre «tie­ ne fácticamente donaciones de conciencia» se impone. 26. N II, 481; «Die Erinnerung hilft dem Andenken» (ibid). 27. Cf. A. J. B u c h e r , Erkenntnisgegenstand und Gegenstandserkenntnis, Bonn 1980.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz