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408 ANTONIO LINAGE CONDE Una manifestación que tiene tres escenarios, a saber, «la casa acos tumbrada» de que hablan los libros de actas, las calles de la villa y la iglesia. Iglesia que fue la parroquia de Santiago hasta derrumbarse ésta durante la guerra civ il 29 y, posteriormente, la de San Justo 30, adonde fue llevada la imagen de la Virgen del Carmen que en aquélla se veneraba. Las funciones allí celebradas eran las primeras vísperas, la misa solemne del día de la fiesta y la de requiem, llamada de hermanos, el siguiente. Todas ellas «con asistencia de ministros» o «ministradas». Y además dos «oficios» — o sean, misas, de difuntos también, prece didas del canto de un nocturno de maitines y seguidas de un respon so— por cada hermano muerto en el año. Por cierto que las vísperas eran una función litúrgica rara en la villa 31, celebrándose además de las de las cofradías sólo las de los santos titulares de las parroquias 32 y ello casi totalmente sin concurso de fieles. De ahí que su adopción por las hermandades implicara una cierta nota de religiosidad viril en medio de un calendario muy apretado de devociones predominantemen te patrimonio de las mujeres. Aunque en el caso concreto del Carmen se haya hablado de una mayor preferencia femenina por ella que por las otras cofradías, y la novena que antecedía a la función no era en cargo de aquélla aunque enlazara con sus solemnidades. ¿Y acaso en el capítulo del canto llano, el A ve Maris Stella no ponía también una nota más de esa índole que los himnos correspondientes de las demás? Impresión a la que contribuían las diferencias entre los respectivos templos de sus sedes, parroquial la del Carmen como hemos dicho, y la de las otras tre s 33 el Salvador, solitario 34 y de románico más so lemne 3S. 29. Pero no a consecuencia de ella. 30. Así llamada la de los Santos Justo y Pastor. 31. Como en casi toda España. La década de los cincuenta, por ejemplo, nos consta que en Madrid, los domingos, sólo se cantaban en la iglesia de los benedictinos de Montserrat, calle de San Bernardo. En cambio en la vecina Francia el dixit dominus domino meo llegaba a ser incluso una de las obliga ciones festivas de los escolares católicos. 32. Mientras proliferaban las novenas y procesiones. 33. San Marcos tiene su propia ermita en su arrabal de Santa Cruz. 34. Desde que dejó de ser a su vez parroquia en 1868, cuando en la villa sólo quedó la de San Justo, pero Santiago y San Bartolomé permanecieron como sus auxiliares. 35. Una fotografía del interior del templo, anterior a su bárbaro vacia miento en la década de los sesenta, puede verse en el artículo Sepúlveda dela
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