PS_NyG_1984v031n002p0321_0342

324 RAUL FORNET BETANCOURT nes o respuestas a la pregunta que interroga por el valor del mundo. Además de ejercerse como cosmología, la filosofía tiene entonces que ejercitarse como ética. En resumen puede decirse, por tanto, que se­ gún Caso la filosofía cumple su función desarrollándose como filosofía natural o cosmología y filosofía moral o ética. En íntima relación con su función en cuanto explicación de la exis­ tencia entiende Caso el sentido de la labor filosófica. En cierta forma el sentido de la filosofía resulta inseparable de su función, ya que en el cumplimiento de ésta encuentra la filosofía su sentido. Pero a su vez el sentido de la filosofía está ya presente en su función como una especie de correctivo de la misma. El sentido orienta, jerarquiza la fun­ cionalidad de la filosofía. Si la función de la filosofía consiste en de­ cirnos qué es el mundo y qué valor tiene, su sentido estriba en sa­ ber decirnos eso de manera que con ello podamos perfeccionar nues­ tra propia humanidad. La filosofía nos ha de ayudar a ser más huma­ nos, a realizar consumadoramente la humanidad del hombre. Tal es su verdadero sentido, según Caso. Por esto el pensador mexicano no duda en jerarquizar la función de la filosofía a la luz de su sentido, conce­ diendo una importancia mucho mayor al aspecto ético que al cosmo­ lógico. Se puede vivir sin saber la naturaleza de las cosas, pero no sin saber cómo es bueno vivir, nos dice. En realidad, para Caso, el sentido de la filosofía se expresa de forma especial en la respuesta a la pre­ gunta sobre el valor de la existencia. Pues aquí no se decide solamen­ te la significación del mundo para el hombre, sino que se esboza ade­ más el camino que el hombre ha de recorrer para alcanzar la transfi­ guración de su ser. Como ética la filosofía nos enseña el camino de la beatitud, el sendero que nos conduce, la felicidad del alma que se sabe en paz consigo misma y con su mundo. Conducirnos por este camino, que es el camino del heroísmo y de la santidad, es el sentido genuino de la filosofía. Siguiendo la visión de Caso puede precisarse también el sentido de la filosofía como un quehacer humanístico. Filosofía, nos dice el pen­ sador mexicano, es siempre humanismo: «...todo sistema filosófico es, en rigor, humanismo. Humanismo intelectualista, si se prefiere como base de la explicación el pensar al sentir y al querer; antiintelectua- lista, si se prefiere el querer al pensar; pero siempre humanismo» 5. Muy mal comprenderíamos a Caso, sin embargo, si quisiéramos con- 4. Problemas filosóficos, en Obras Completas II, México 1973, 67.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz