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138 ALFONSO GUERRERO Según la Circular Kriege incurre en los siguientes defectos: 1) transforma al comunismo en un rumiar sobre el amor; 2) carece de un análisis científico («transformar a todos los hombres en propietarios privados es tan irrealizable y tan comunista como transformar a todos los hombres en emperadores o papas»), 3) al afirmar que el individuo es representante de la especie y al confundir comunismo y comunión cae en una fanfarronada metafísica; 4) su flirteo con la religión com­ porta tremendas consecuencias: los pobres reemplazan al proletariado, la lucha de clases es reemplazada por la caridad individual, paterna- lismo social e intolerancia fanática74. El objetivo de la lucha comunista según Kriege es «hacer de la religión del amor una verdad y hacer realidad esa comunidad entre los habitantes que impacientemente esperan, desde tan largo tiempo la man­ dón bienaventurada». Responden Marx y Engels: Kriege olvida que esos excesos de imaginación cristiana no son sino la expresión fantás­ tica del mundo real y que, por tanto, su 'realidad’ existe ya en las condiciones perversas de este mundo real» 75. Dice Kriege: «Pedimos en nombre de esta religión del amor que se sacie al que tiene hambre, que se dé de beber al sediento y que se vista al desnudo». Comentan Marx y Engels: «petición repetida hasta la saciedad y sin el menor resultado desde hace 1800 añ o s»76. Kriege pregunta: «¿N o nos asiste, pues, la razón, al querer tomar en serio las viejas aspiraciones del corazón religioso y al declarar la guerra en nombre de los pobres, de los desgraciados, de los relegados a fin de llevar a cabo, de una vez, el hermoso reino del amor fraterno?». Observan Marx y Engels: «Kriege entra, pues, en lucha por tomarse en serio las aspiraciones no del corazón real y profano, sino del corazón religioso; no del corazón empapado de amargura por la miseria real sino atiborrado de ensueños paradisíacos»77. 2.3. Crítica económica La crítica marxiana de la religión no es sólo filosófica y política. Es también económica. Ya no se trata de una crítica filosófica al estilo feuerbachiano — la religión como realización fantástica de la esencia 74. Cf. J . G uichard , 224-229. 75. K. M arx - F. E n g els , Circular contra Kriege, en Sobre la Religión, 171. 76. Id., o. c .} 172. 77. Ibid.

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