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208 JOSE LUIS LARRABE Y no sólo acude a la biblia, sino también a los Padres que le pre­ cedieron, para de aquélla y de éstos sacar sus consideraciones teológicas acerca del bautismo y del carácter propio de este sacramento funda­ mental: «el bautismo es el principio de la vida espiritual, sello y cus­ todia e iluminación de la mente» 22. De este texto del Damasceno saca y deduce San Buenaventura cuatro notas del carácter bautismal: en primer lugar se trata de preparación a la gracia y por tanto de principio de vida; además es nota distintiva de quienes pertenecen a la grey (comunidad) del Señor; de aquí que le llame con el nombre de sello; como es indeleble su carácter, de ahí que se le llame custodia ; y como dispone a la fe, se le asigna como efecto la iluminación de la mente 23. Siguen citas de autores anteriores de donde concluye que «el bau­ tismo es sacramento de regeneración», «que subsiste en el alma», «que transforma y eleva espiritualmente nuestro movimientos animales», «dándonos afinidad para con la palabra de Dios y las acciones corres­ pondientes», acompañándonos en todo el itinerario hacia el descanso eterno 24. Que «el bautismo nos trae la gracia vivificadora del alma» (gratia vivificans animam), «que por este sacramento habita en nosotros una potencia virtuosa», «activa» (no puramente pasiva) y al mismo tiempo contemplativa, son reflexiones teológicas de San Buenaventura que vienen en buena ley de interpretación bíblica y patrística de sus citas anteriores de las fuentes 25. Necesidad de la je «En el bautismo, que es Sacramento de la fe, es necesario que exista profesión de la fe» 26, en su celebración no debe faltar esta profesión de fe «corde et ore»: «de corazón y de boca», porque, aunque todas las cosas han sido creadas por el Verbo desde un principio, pero esto no quita para que su actuación eficiente (en el orden salvífico) sea 22. D am ascen o , Lib. IV De fide orthodoxa, c. 9, citado por S an B uen a ­ ven tu ra , cita de la nota 21. 23. Ibid. 24. Ibid. 25. Ibid. 26. Ibid., q. 2: «In baptismo, quod est Sacramentum fídei, necesse est esse professionem fidei».

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