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78 C elin a A na L ertora M endoza pojado al argumento por el infinito del valor apodíctico y generalizado que se le atribuía, mostrando que no sólo no es intuitivamente verda­ dero, sino que es posible encontrar hipótesis alternativas. Y aun más: es posible admitir la infinitud sin renunciar a la inteligibilidad del pro­ ceso. Esto, por supuesto, está ligado con la peculiar epistemología ockhamista, según la cual el conocimiento consiste en un conjunto sucesivo de actos puntuales de la mente. Y también es acorde con su ontología, en la que cabe una permanente creación y aniquilación. Que todo esto no es inconsistente, y que el sistema puede tener cohe­ rencia interna, lo muestra la misma obra de Ockham. Por lo tanto, es evidente la relación entre la aceptación o rechazo de ciertos argu­ mentos lógicos y los supuestos metafísicos que inclinan por una alter­ nativa. Si bien la lógica puede ser aséptica en su ámbito propio, no lo es en cuanto a los puntos de conexión con la filosofía (o teoría de la realidad, no del lenguaje), que son más numerosos y significativos de lo que suele pensarse. Celina Ana L ertora M endoza Consejo Nacional de Investigaciones Científicas Buenos Aires

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