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R aíces y e n t o r n o d e l a p e r s o n a l i d a d . 555 IV.—EL PROBLEMA DE INCORPORAR LA CLINICA A LA HISTORIOGRAFIA Cuando Laín 59 trata de justificar la producción histórica de Gre­ gorio Marañón, escribe: «Porque la inteligencia del hombre se halla constitutivamente obligada a moverse hacia el futuro, el pasado la está llamando sin cesar. ¿Quiére esto decir que todo hombre, por el hecho de serlo, tiene vocación de his­ toriador? En modo alguno. Historiador es tan sólo quien descubre la pe­ culiar razón de ser de cada una de las situaciones del pasado —sea éste de la filosofía, del arte, del saber matemático o de la acción política— y se siente íntimamente llamado a la faena de investigarla y comprender­ la con rigor intelectual y técnico. Este fue el caso de Marañón; y nues­ tro problema consiste en descubrir cómo, siendo ya doctor famoso y pen­ sando que el médico, en la calle, debe ser puro médico, llegó a hacerse tan cabal y eminente cultivador de la Historia». Coherente con el esquema que me he trazado al confeccionar estas páginas, me detengo en este problema, que tanto Laín como otros autores han tratado ya de clarificar —y yo soy bien consciente de ello— , pero que no quiero dejar sin haber tratado de profundizar en él. 1. Historiología y ciencia histórica a) Dos extremos peligrosos para la ciencia histórica Leónidas Hegenberg en su libro Introducción a la filosofía de la ciencia60 dedica un capítulo a los problemas especiales de la ciencia histórica. Señala él dos extremos peligrosos en los que suelen incidir gran número dehistoriadores: 1) La idea de una inevitabilidad his­ tórica, que «hoy parece totalmente superada», por una parte. Según aquellos que se encuentran en este extremo —quizá no tan superado como pueda pensar Hegenberg— , la voluntad humana estaría sometida a toda una compleja concatenación de condicionantes-leyes supraperso- nales que predeterminan el comportamiento de los humanos, débiles 59. I, LXX I-LXX II. Subrayado mío. 60. Introducción a la filosofía de la ciencia, Barcelona 1969.