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128 I. MANZANO El primer bloque comprende la designación de a quién va dirigida la alabanza, esto es, «Altísimo, Omnipotente», etc., y está constituido por las dos primeras estrofas (1-2). El segundo bloque da la indicación de las criaturas en general y las criaturas inanimadas concretas como el sol, la luna, etc., y los cuatro elementos, esto es, los contenidos expresados en las estro­ fas 3-9. El tercer bloque es aquél en que se refiere a acciones del hombre: perdonan, sufren en paz y mueren para bien o para mal. Esto es, las estrofas 10-13. El cuarto bloque lo constituye la estrofa última y es una invitación a la alabanza, etc., al Señor con gran humildad. En cuanto a los contenidos del primer bloque, esto es, que Dios es el «Altísimo, el Omnipotente y buen Señor...», es evidente que están presentes de continuo en los otros escritos de San Francisco. Sin querer mencionar todos los lugares en los que Francisco expresa estos contenidos, citemos como muestra, la «Alabanza al Dios Altísimo» u, que no tiene más que este contenido, y, repetidamente, en el capítulo 23 de la primera Regla 45. Lo que se expresa aquí, insistimos, es que nin­ guna alabanza, adoración, acción de gracias alaba, adora o da gracias a Dios como El lo merece; lo que es verdad. Pero nunca en el sentido del deísmo que le imponen a San Francisco muchos autores, entre los cuales Leclerc, en el sentido de que esas alabanzas caen en el vacío y como si Dios fuera para Francisco una realidad sublime de la que podemos, justo porque es sublime, prescindir y poner entre parén­ tesis. El cuarto bloque, esto es la invitación a la alabanza del Señor es de talante netamente de San Francisco y pertenece de lleno a la textura espiritual del Santo. Basta recorrer los «salmos» de San Fran­ cisco que hemos indicado páginas atrás. Una cuestión ulterior, pero que no cancela lo primero, es saber a quiénes invita San Francisco a la alabanza en el Cántico del Hermano Sol: si a todas las criaturas; si a las mencionadas: sol, luna, etc.; si a todos los hombres y sólo a éstos (y no a las criaturas); si sólo a los Frailes Menores. Sin que yo haya llegado a una claridad completa, me inclino a creer que es una invitación a los Frailes Menores a la alabanza del Señor. El sentido 44. AID: 25. 45. En los números 1, al final del n. 6 y n. 10.

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