PS_NyG_1981v028n003p0391_04050410

EL OCCIDENTE AL ENCUENTRO DEL ORIENTE. 395 de Nishida con San Francisco sino también la altura metafísica donde ésta tiene lugar: los transcendentales del ser. Otro tercer dato histórico japonés nos lo brinda el estudio de Fumi Sakaguchi10. Se intenta en él precisar el concepto de sabiduría según San Buenaventura. De él nos ocupamos en una recensión para la revista «Naturaleza y Gracia» 11. En aquella recensión anotábamos que el mérito mayor y lo más novedoso del estudio consistía en haber puesto en relieve uno de los temas primarios de nuestra hora: el Encuentro de Culturas. La joven investigadora hace ver que, debajo de las diferencias innegables entre las diversas culturas, hay una honda problemática humana que es fundamentalmente la misma. La escritora nos asoma a ese gran tema de la mutua afinidad de culturas. También nos habla de la simpatía que la forma mentís franciscana despierta en las mentes orientales. Esto que escribíamos en 1974 lo retomamos ahora, añadiendo que la autora cita reiteradamente a San Francisco de quien, según ella, en línea con los franciscanistas occidentales, toma su mentalidad San Buenaventura, a quien estudia detenidamente. Desde la perspectiva de estas reflexiones ya es bien significativo que en una obra, dedicada a investigar una noción tan honda del pensar bonaven- turiano, como el de «sapientia», la autora se permita un «excursus» con este título: Intento de comparación con el budismo (del pensa­ miento bonaventuriano)12. Esto prueba que el Oriente, al que denomi­ namos «Lejano» se halla más cerca de nosotros de lo que en ocasiones se cree. Los textos que hemos citado — se pudieran multiplicar— nos hablan de que San Francisco es una estación de tránsito y enlace entre los dos grandes mundos: Oriente y Occidente. A esta luz se comprende que el benedictino Thomas Ohm, buen conocedor de la cultura oriental, haya podido escribir estas líneas: «Los asiáticos, según Junyu Kitayama, opinan que el Occidente quiere tener a Dios cautivo en los grandiosos templos; en el Oriente halla el hom­ bre a Dios en el templo solitario, en la cima del monte, en el bosque, en la flor del cerezo y en la hoja del otoño; en este punto Eckhart y Francisco de Asís estaban más cerca del Oriente y formaron aquí lazos de unión» 13. 10. Der Begriff der Weisheit in den Hauptwerken Bonaventuras, München 1968. 11. 21 (1974) 290. 12. O c., 76-92. 13. Crítica de Asia sobre el Cristianismo de Occidente, Buenos Aires 1950, 96.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz