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UN CANONIGO SEPULVEDANO DE LEON 21 m a31 y está próximo al blanco santuario de la patrona de ésta, la Virgen de Hontanares, venerada en el seno de un precioso paisaje de montaña. No es uno de los lugares de pareja situación que se agazapan a las faldas de la sierra. No. Riofrío se asienta sin pretensiones sobre una de las lomas de ondulaciones femeninas que anteceden a aquélla, la de Ayllón en concreto 32. En la comarca el pueblo era conocido por la elaboración del carbón de encina, y gozaban de fama sus llamadas «patatas de siembra», buscadas y utilizadas para ésta en atención a su mejor calidad. Y abundan todavía allí los rebaños de cabras. La parroquia, bajo la titularidad de San Miguel, de sencillo plano de cruz latina y tan ancha como baja torre, sólo tiene abovedado el ábside de planta redonda, mientras que la techumbre de sus dos capillas laterales desciende a una sola vertiente. Lleva adosado el cementerio, uno de esos «corrales de muertos entre pobres tapias» que cantara don Miguel de Unamuno. Es de gris piedra sin labrar y no tiene más estilo que el de la costumbre rural del terruño. La imagen del patrón arcangélico, de ingenua policromía, no solamente lleva la espada, vencedora del ángel malo reducido a sus pies, sino también la balanza pesadora de las almas. Y en una colina del término existe una ermita de San Benito, junto a la cual sus vecinos y los de Cerezo de Arriba celebran una romería anual33. Allí, pues, se estrenó en su ministerio nuestro joven levita, quien parece que desde un principio había abrigado el designio de salirse de los cauces exclusivos del clero diocesano, puesto que poco después de que transcurrieran tres años, el 30 de noviembre de 1867, le era admitida la renuncia a su curato, en atención a haber formado patri- 31. El pueblo tradicionalmente rival de Sepúlveda, sobre todo a causa de disputas por el aprovechamiento de leñas y pastos comunales que remontan a la Edad Media. En Sepúlveda eran conocidos los naturales de Riaza por el des­ pectivo vocablo de «caballotes». Sobre tales antecedentes históricos, acaba de aparecer nuestro artículo Del Fuero de Sepúlveda a las "consuetudines” monásticas. Notas notariales de una vida, en Anales de la Academia Matritense del Notariado 22 (1978-1981) 387-401. 32. Pocos años ha que se ha creado cerca y al oeste, la estación invernal de La Pinilla. 33. Por lo menos ahora tiene lugar el primer domingo de julio. Si tene­ mos en cuenta la mínima densidad monástica de este territorio y las motivacio­ nes de la difusión del culto a San Benito de Nursia, la tal advocación no puede por menos de resultarnos un tanto extraña. Cabría pensar si se trata de otro, aunque no lo creemos en este caso probable. No insistimos en la cuestión por rozar sólo muy marginalmente nuestro tema.

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