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3 8 6 DOMINGO MONTERO Además, la datación de los evangelios de M t y Le en tre los años 70-80 lleva a la conclusión de que las noticias transm itidas debían h ab er cristalizado p o r los años 40-60, cuando todavía hay testigos de los acontecim ientos que se cuentan. E s verdad que no todos los elementos reseñados en los evangelios p resen tan las mismas pretensiones de nivel histórico, p o r lo que se impone un delicado d isc ern im ien to 50. — Núcleos históricos E n tra r a discernir en los relatos de la infancia elementos históricos y elementos redaccionales es una tarea indeclinable, porque existen am ­ bos elem entos, pero amenazada de peligros p o r la propensión a caer en posiciones apriorísticas, manejando el b istu rí con más interés que razón. No existe uniform idad a la hora de catalogar esos elem entos. E n tan to que unos reconocen fiabilidad histórica al nom bre y relación de los personajes principales, a la ascendencia davídica de Jesús, al nacim iento en Belén, a su concepción virginal, al asentam iento en N azaret, a la ubicación cronológica en los alrededores del reinadode H erod es, y a algunos datos sobre el B a u tista 51; otro s restringenlos «hechos históricos», silenciando explícitam ente toda mención a la in ­ tervención del E sp íritu y a la concepción virginal, amén de otros datos como el nacim iento en B e lé n ...52. — Relación Mateo-Lucas D ado que ambos evangelios son los únicos transm isores de los re­ latos de la infancia, con afinidades im portan tes y peculiaridades signi­ ficativas, surge la p regun ta po r la relación en tre ambos. F itzm yer ase­ gura que se ha llegado a un consenso cifrado en los siguientes puntos: independencia radical de ambos y uso de una antigua tradición cris­ tiana precedente al menos en algunos d e ta lle s 53. Sin em bargo, no falta quien sostiene la p rio ridad del tex to de M ateo y la ob ra correctiva realizada po r Lucas sobre ese original, sustituyendo ciertos elementos m idrásicos, desplazando el interés teológico y m atizando algunos datos cronológicos M. 50. R. E. Brown, a. c., 24-25. 51. R. P uigdollers , La historicidad de los relatos de la infancia, en Ana- lecta Calasanctiana X X I (1979) 13-43. 52. J. R iedd , Die Vorgeschichte Jesu, Stuttgart 1968, 12-13. 53. J. A. F itzm yer , a. c., 562. 54. R. P uigdollers , a. c., 32-33.