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EL DIOS INSUSTITUIBLE 103 que de futuro o presente se trata del hombre: con su ser, su historia, su mundo. Hay que reconocer que esta iluminación teórica no ha tenido todo el influjo debido en la práctica cristiana, que se ha refugiado con pre­ ferencia en el futuro metahistórico. Hoy se le exige una relectura a fondo de los contenidos de la escatología (resurrección, nueva crea­ ción, vida eterna) para que se trasparente su incidencia en la historia viva y se perciba la presencia del ya polarizada por el ésjaton (el foda- vía-no). 6 . Anexo psicoanalítico 7 Como factor de orientación en la visión del conjunto es oportuno traer a examen la idea del hombre en las nuevas psicologías. El psico­ análisis, técnica psiquiátrica en un principio, se convierte luego en una antropología a la que no es extraño ningún secreto humano, incluso el fenómeno religioso. El psicoanálisis constituye una curiosa mezcla del pesimismo respecto de la naturaleza humana (dominio y dialéctica de pulsiones e instintos, huellas indelebles de la educación recibida, explicación de la vida espiritual como sublimación de los instintos, etc.) y de optimismo ante la supuesta posibilidad de liberar al hombre de sus angustias y complejos negativos mediante el conocimiento de la dinámica de los instintos y la supresión de la represión de los mismos. Se ha exagerado en muchos puntos el éxito del psicoanálisis y de otras corrientes de difusión más reciente. El optimismo se tiene que ir moderando por el hecho de que los resultados terapéuticos más satis­ factorios de la psiquiatría no han venido por el psicoanálisis sino por los caminos de la psiquiatría biológica. Por otra parte, la psicología va siendo cada vez más sociológica, más abierta al futuro y a la comunidad; no sólo al pasado del sujeto y al criterio personal del terapeuta. Y si muchos fenómenos humanos —sentimiento de culpa, de desesperanza, de desconfianza— se quisieron pasar abruptamente de la teología a la psiquiatría, hay que reconocer se trata de dos esferas no exclusivas que es preciso deslindar e integrar equilibradamente. 7. J. J. López - Ibor A liño, La ¡dea del hombre en las nuevas psicologías.