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26 DOMINGO MONTERO Sobre la peculiaridad de que se encuentre este logion sólo en Mateo, W . L . Knox afirma que es más fácil suponer que lo haya omitido Lucas por olvido, que pensar que sea una adición de M ateo33. Para unos, es el testimonio claro de una misión histórica, delimi tada geográficamente, y que se remonta al mismo Jesús 34. Para otros, es el reflejo de una situación polémica en la comunidad primitiva respecto a la misión de los gentiles ( = Act 10-11). Representaría la actitud del grupo fuerte que consideraba la apertura con desaprobación, y encontró una voz profética para prohibirla en el nombre del Señor resucitado35. Estaríamos escuchando la voz de un judeo-cristianismo estricto, según E . Kasemann. Pero el motivo por el que se rechaza la apertura no sería la hostilidad hacia los gentiles. La clave interpreta tiva de la prohibición encontraría su base en una concepción apocalíp tica que combina la afluencia de los gentiles al Monte de Sión con el triunfo escatológico de Israel como su último y su más visible signo. Si la conversión de los gentiles es el más propio y escatológico trabajo de Dios, cualquier intento humano por anticiparlo debería ser consi derado como una apropiación indebida de un derecho que D ios tiene reservado para sí. Lo único que puede hacerse en el presente (de la comunidad), es conducir las ovejas perdidas de la casa de Israel a la unidad del pueblo mesiánico36 Otros, por el contrario sostienen que se trataría de una formación redaccional. No habría existido un judaismo judeo-cristiano que hu biera refutado radicalmente la misión. M t 10, 5b-6 sería la expresión historizante del tema del cumplimiento cristólogico: Jesús había cum plido la promesa hecha a Is ra e l37. No falta quien encuentra en estos versículos una antigua tradición basada en la praxis misionera de la primitiva comunidad: Pablo se dirige primero a los judíos y, sólo después del rechazo de estos, en un momento posterior, se encamina hacia los gentiles: Act 13, 46-47. Mateo lo utilizaría con fines apologéticos para probar la mesianidad de Jesús. En la limitación de la actuación apostólica de Jesús (M t 15, 24), paralelo que falta en Marcos, participan también los doce (M t 33. O. c.j 50. 34. X. L e ô n -D u fo u r , o . c., 433 ss. 35. F. W. B eare, o . c ., 9. 36. E. Kasemann, o . c., 88. 37. R. Bultmann, L ’histoire da la tradition synoptique, trad. A. Malet, Pa ris 1973, 552.
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