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20 DOMINGO MONTERO primera a la segunda generación cristiana, cambió la situación teoló­ gica. Mateo responde al cambio historizando, erizando e instituciona­ lizando la tradición de los Evangelios 22. E l primer evangelista entiende la realidad escatológica como algo fundamentalmente realizado ya, pero aún no consumado. I. Misión: 10, 1-15 E n estos versículos se encuentra reunido todo el material que Mar­ cos y Lucas presentan con ocasión de la misión de los doce y de los setenta (ó 72). La individuación de esta sección encuentra su fundamento en la uniformidad del vocabulario. Puede dividirse, sumariamente, en dos partes, con un sujeto relevante en cada uno de ellas. En los vv. 1-8 Jesús es el protagonista que llama, da poder y envía; en los vv. 9-15 son los discípulos quienes pasan a ocupar un primer plano: su com­ portamiento constituye el centro de interés. Los verbos principales, tanto por lo que se refiere a Jesús como a los doce, son verbos de acción, predominantemente de movimiento. A sí, Jesús: proskalesame- n os... apesteilen... paraggeilas... Referente a los discípulos: me apel­ íllete... me eiselthete... poreuesthe... poreuomenoi... meinate... exel- théte... eiserchomenoi... exerchomenoi. Todo esto situado en el marco del camino, eis bodon, con el equipamientoapropiado: hypodémata y rabdon (si bien sea en sentido prohibitivo). Un tema fundamental de esta primera sección es el de la indenti- dad del Maestro y del discípulo en la misión (vv. 78 = M t 4, 1 7 ) y en las consecuencias del rechazo del discípulo, que es equiparado al Maestro (v. 15 = M t 11, 24). Estructuración a) 10 ,1-8 : 10, 1-2 : enunciado general 10, 2-4 : la lista de los doce 10, 5-6 : a las ovejas de Israel 10, 7-8a: identidad de la obra de Jesús y de los doce ( = M t 4, 17). 22. G. S tre ck e r, Das Geschiehtsverstandnis des Mattdus, en Evangelische Theologie 26 (1966) 57-74. Para la cuestión escatología-parusía puede verse el estudio de R. M. T re v ija n o , La escatología del Evangelio de S. Mateo, en Bur- gense 9 (1968) 9-23. También ofrece interés el artículo de G. E. Ladd, Consistent or Realized Escathology in Mt?, en Southwestern Journal of Tbeology 5 (1962)

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