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116 ALEJANDRO ROLDAN V ILLER 3 ) Nosotipo del santo. — Como com plem ento del som atotipo, digamos algo del nosotipo (concepto m oderno, desarrollado especialm ente por Shel- d on ) 3I. S. Buenaventura nos dice, en general, de S. Francisco que fue: «afligido su cuerpo con los dolores de aguda y prolongada enferm edad» 32. Y Sarasola, basado en la Leyenda Antigua, habla tam bién, en general, de su «com ple­ xión delicadísim a, y los graves queb ran to s que m aceraron tod a su existen­ cia» 33 y, más en concreto, de que, en su mocedad, le vemos hostigado de fiebres malignas, y que a los 25 años arreciaron las enferm edades con p e rti­ naces recaídas: «acósanle achaques, que d u ran te tres días le p rivan del habla; consunciones, fiebres in term iten tes, desmayos, agotam ientos nerviosos»; y, en fin, de que a los 40 años tenía: «achaques habituales de hígado, bazo y estómago», a lo que: «añadióse en O rien te , una afección agudísima de ojos, con fuertes dolores e implacable destrozo cotidiano, term inó, al fin, en ce­ guera com pleta» 34. P ues bien, una somera observación sobre lo que acabamos de decir, nos dem uestra que los órganos más afectados en la salud del santo fueron los viscerales, p rovenientes del p rim er com ponente endomórfico (estóm ago, hí­ gado, bazo), y en segundo lugar los que proceden del tercer com ponente ectomórfico (sistem a nervioso y sentidos). E sto viene a confirmar el valor de las modestas conclusiones a que hemos podido llegar con el examen, tan to de la descripción somática de los contem poráneos, como de las que se deducen de la visión antroposcópica de las dos prim eras representaciones pictóricas del santo: es decir, que el som atotipo de S. Francisco era p redom inan tem ente mesomòrfico, y secundariam ente del tipo ectomórfico, o sea, un tipo 2 . ° - 3 " sheldoniano [u n 2-5-4 ap rox im ad am en te]. 2 . P s ic o t ip o d e S. F r a n c is c o Como, en el m aterial que nos ofrecen los hagiógrafos, no hay dato s sufi­ cientes p ara hacer un estud io «analítico» del psicotipo del santo, según el m étodo sh e ld o n ia n o 35 — ¡y no puede m aravillarnos, pues a los hagiógrafos 31. The Varieties of Human Physique, Nueva York 1940 [Trad. frane. París 1950, 297 ss.]. 32. C. 1, n. 2 [BAC 469], 33. O. e., 489. 34. Id ., o . c ., 403. 35. Decimos que los datos sobre el aspecto puramente psicológico son insuficientes, pero es claro que existen algunos. Consignemos varios, como simple muestra: 1) Antes de darse a Dios, parece que era algo «com ilón» [Componente 1 .°], o como afirma Sarasola con frase hiriente (o. c., 77): «Bien sabían todos, y el mismo Francisco confesaba más tarde a sus discípulos, que siempre había sido un valiente gargantón de manjares refinados, y que nada agradable negó nunca al paladar»: Leyenda de los tres compañeros, n. 22 [BAC 719]; 2) Tenía voz vehemente, [dulce], clara y sonora [Componente 2.°]: I C elano , n, 83 [BAC 301]; 3) Sueño brevísimo y trabajo continuo