PS_NyG_1977v024n003p0383_0465
4 6 0 ALEJANDRO DE VILLALMONTE El estado paradisíaco quería describir el proyecto o plan de Dios sobre el hombre [16, 18]. Mientras que el pecado primero sería la constatación de que, al surgir la conciencia, en el paso de la inocencia a la libertad reflexiva, el hombre peca. Pasa de la pecabilidad al pecado. Con lo cual Gen 2-3 diría que el pecado pertenece a la condición humana; pero sin que sea un mal ontológico y fatal, sino histórico, provocado por decisión del hombre [ 16 7, 44, 52, 84], De esta forma el pecado pertenecería a la condición humana, como un presupuesto dialéctico de su desarrollo; como un elemento pedagógico en manos de Dios. Incluso como un regalo en orden a manifestar la abundancia de su gracia. Giovanni Blandino 63 E l interés de su escrito se dirige a mostrar que el poligenismo no es in compatible con la doctrina del pecado original. La unicidad del pecado ori ginante no es verdad revelada [ 2 3 ] . Con sus propias palabras podría resu mirse su hipótesis muy sucintamente expuesta: «Dios ha creado al hombre para la felicidad, pero le ha sujetado a prue ba. Dada la fragilidad humana es probable que los hombres pequen. Así, pues, Dios ha previsto que la humanidad pecaría con frecuencia. Por eso la ha creado sujeta al dolor, a la muerte, al impulso de pasiones desordenadas. Esta condición de "muerte” tenía función de expiación y de integración de la prueba. Por este mismo motivo dispuso Dios que los hombres no reci biesen la gracia por generación, sino mediante un sacramento» [ 24 ] . Punto central: Dios hace al hombre mísero «en base a la previsión del hecho de que la humanidad habría de ser reiteradamente pecadora» [ 2 5 ] . Aquí no hay duda de que la muerte viene por el pecado [ 2 7 ] . Y no ya por el pecado de uno solo, sino por el pecadode todos los hombres [ 28 ] , En tal hipótesis la economía paradisíaca nunca tuvo realidad, nunca fue reali zada [ 3 1 ] . Se ve claro que, en esta explicación, no hay problemas con el monogenismo o poligenismo antropológico ni con cualquier teoría científica sobre la evolución humana [ 34 ] . La forma brevísima en que Bl expone su hipótesis y lo poco razonada que está no permiten dar un juicio preciso. En cuanto logra eliminar todo conflicto innecesario con la ciencia ofrecería una ventaja. Pero, no vemos jus tificada la teoría propuesta para explicar el origen de la muerte en un decreto divino que ha previsto ab aeterno el pecado del hombre. 65. G . B landino, Peccalo originale e poligenismo. Le recenti ipotesi teologiche e un nuovo tentativo di soluzione, 23-36.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz