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326 ANGEL RODENAS fos apóstoles; y el verbo 7¡vcq-xáa0y] (v. 3) al resultado consiguiente a dicha exposición, que es ya naturalmente tiempo pasado cuando Pablo escribe su carta. Es decir, Pablo expuso el evangelio aparte a los notables, para que sus afanes apostólicos de entonces o del tiempo que llevaba entregado a la actividad evangelizadora no resultaran estériles. El apóstol alcanzó su ob jetivo, puesto que efectivamente los dirigentes no le obligaron a circun cidar a Tito. 12. Una última dificultad, a primera vista bastante fuerte, contra mi tesis, consistiría en que, si se acepta la correspondencia de Gal 2, 1-10 con la asamblea de Jerusalén (Act 15), resultaría que de todos modos hubo al menos una reunión pública además de la privada M, aun admitiendo que en Gal 2 Pablo se refiere exclusivamente a la privada. Pero enese caso, si el asunto de la circuncisión y la observancia de la ley se ventiló también en público (cf. Act 15, 5), no parece lógico decir que Pablo atribuye en Gal 2, 2 el triunfo de haber conseguido que no le impusieranla circunci sión a la circunstancia de haber expuesto su evangelio en privado a los res ponsables de la comunidad de Jerusalén. Tampoco esta objeción me parece insuperable, si tenemos en cuenta al gunas puntualizaciones que es ncesario hacer. En primer lugar, no es com pletamente seguro que deba identificarse el viaje de Gal 2 con el de Act 15. Concedamos sin embargo que sí lo es. Aun entonces opino, con otros exe- getas, que la introducción al relato que nos ofrece Lucas (Act 15, 1. 2) es redaccional3S, lo que significa que «es en Jerusalén y solamente allí donde surge el problema de la circuncisión, según Act 15, 5 como según Gal 2, 4. El motivo primero que hizo subir a Pablo y Bernabé a Jerusalén no tiene nada que ver con ese problema» 36. En ese caso pierde fuerza la idea de que Pablo llegó a Jerusalén precedido de las acusaciones de los judaizantes, que deseaban verlo desautorizado públicamente por los apóstoles de Jerusalén. La realidad debió ser más bien que el problema surgió a raíz de haber ex puesto Pablo «todo lo que Dios había hecho» con él y Bernabé (cf. Act 15, 4 ) 37. Los judaizantes debieron reaccionar entonces provocando la cues 34. Benoit defiende la doble reuniSn en el texto paulino; pero, a diferencia de los que ven una alusión a la sesión pública en el aùmç del v. 2 , reconoce en este lugar sólo la referencia a la reunión privada (xax't’St'av Sè toîç SoxoDotv), v en esto coincido plenamente con él. La sesión pública estaría indicada implícitamente en el v. 4, cuando Pablo alude a los «falsos hermanos, que se infiltraron para espiar la libertad que tene mos como cristianos». Cf. P. B e n o it, La deuxième visite de saint Paul à Jérusalem, en Bib 40 (1959) 791. 35. Así opina, por ejemplo, P. B e n o it, a. c., 783-785. Tanto los versículos 12, 25 como Act 15, 1-2 no serían otra cosa que suturas redaccionales destinadas a enlazar el bloque formado por los capítulos 13 y 14 con la trama de conjunto. 36. Cf. P. BencTit, a. c., 791. 37. La noticia de que Pablo y Bernabé «contaron todo lo que Dios había hecho con ellos» se refiere ordinariamente al viaje de misión que se relata en Act 13-14. Hay auto-
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