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E L PECADO OR IG INAL. 221 en sí, como en germen, la voluntad de todos los hombres 16. Similar dificul tad reina en otro problema relacionado con el de la imputabilidad: la tras misión del pecado original. Cuestión que se desdobla en dos: por qué lo con traemos y cómo lo contraemos. La escuela agustiniana responde que el pe cado original se trasmite a todos porque todos tenemos unidad física con Adán y el canal de trasmisión es el hecho de que todos somos engendrados con concupiscencia y en concupiscencia. La escuela obelardiana insiste en la unidad de todos en Adán; pero no sabe precisar mucho el modo de trasmi sión. Los anselmianos tienen más a mano la solución: contraemos el origi nal porque todos estábamos en Adán como en la naturaleza común y univer sal de la cual somos participación. Respecto al modo de trasmisión el problema es más agudo. Domina la convicción de que el pecado original se trasmite desde el cuerpo al alma. ¿Cómo? Su mancha, su corrupción contagia al alma, la cual, por castigo de Dios, entra en el cuerpo desprovista del poder que originariamente poseía para gobernarlo según la recta razón n. Otra cuestión de indudable impor tancia es ésta: ¿Cómo quita el bautismo el pecado original? E l hecho es indudable; pero es claro que, a tenor de las diversas teorías sobre el peca do original, habría de ser diversa la explicación del hecho 18. Una última observación. Durante los siglos x i i y xm la teología del pe cado original sigue radicalmente dominada por Agustín. Sólo se apartan de él en ciertas afirmaciones que parecían extremosas. La más original es la so lución anselmiana, pero ésta nunca fue seguida en su estado puro. E l peso de Agustín llevó a mantener la importancia primordial de la concupiscencia en toda la problemática sobre el pecado original. De esta forma, concluye Lottin, la explicación agustiniana, en vez de favorecer, impide el progreso de la teología del pecado o rig in a l19. Pedro de Alcántara Martínez fija su atención, ante todo, en las ideas filosóficas que están en la base de las diversas teorías sobre el pecado original aparecidas desde el siglo x n hasta la época postridentina. E l estudio es bas tante esquemático y nosotros debemos esquematizar mucho más. Las teorías filosóficas que más influyen en la explicación del pecado ori ginal son la teoría hilemórfica sobre la unión del alma con el cuerpo y la teoría de los universales. Así, el realismo exagerado de Anselmo en este pro blema filosófico le habría llevado a hablar de Adán como de una naturaleza universal común, en cuya participación todos reciben la justicia o la pierden, según la conducta de Adán. Por el contrario, el nominalismo de Abelardo 16. L. c„ 275-6. 17. L. c., 276-8. 18. L. c„ 283-305. 19. «Bajo estos diversos aspectos la enseñanza agustiniana lejos de favorecer impidió el progreso del pensamiento teológico de la edad media». L. c., 280.
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