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LA FILO SOFIA DE LA RELIG ION EN KARL JASPERS 103 velación y la Iglesia. Aunque, com o veremos en seguida, estos dos aspectos son inseparables. Habíamos dicho que la englobante era la secularización del Dios de Kierkegaard. Pues bien, nuestro autor llama también a su Dios la Trascendencia. La revelación es una manifestación de la englobante de la Trascendencia. Sólo que esta manifestación posee una objetivación en la comunidad de la Iglesia, con sus ritos, sus dogmas y sus estructuras sociales. De tal forma que la revelación sufre com o una petrificación que hace olvidar, según Jaspers, cuál es su sentido primero: un acto de la subjetividad del hombre o de su libertad, en el cual la existencia en el contacto con la Trascendencia ha producido el acontecim iento religioso. Así, la religión en su prístina raíz es una acción del individuo, quien interpreta las cifras de su vida en un contexto de relación con una divinidad «personal»; la cual le comunica un mensaje que él debe trasmitir a los demás hombres: la religión tiende siempre a la universalidad y a la comunidad cultual. Es en esta necesaria objetivación donde se pierde lo que fue originariamente la revelación. De ahí la lucha a través de los siglos entre la institución esta­ blecida y el reform ador o el hereje. De tal forma que el hombre que reacciona contra la comunidad petrificada entra a formar par­ te de lo que Jaspers llamará las excepciones de la historia; esos hombres que caminan solos en la vida, y que hacen suya la frase de Hamlet, tan amada por Jaspers: «Y o debo caminar delante de mi destino aferrándome a é l » " . Desde este punto de vista, Cristo, Buda, Giordano Bruno, Kierkegaard y Nietzsche son algunos ejem ­ plos de los más meditados por Jaspers. En particular la figura de Cristo es muy importante para nuestro filósofo; porque Jesús, jun to con el mundo greco-romano, es la base misma del Occiden­ te. «La cruz de Cristo significa: aquel que quiera vivir com o yo, debe aprender a saber morir por el hombre» 12. Así, la Biblia es esencial para comprender nuestra civilización. En ella se encuentran resumidas las experiencias religiosas, varias veces milenarias, que han engendrado el cristianismo; y esto en la variedad de sus formas: catolicismo, protestantismo, ortodoxia, etc. Según Jaspers, la Biblia no pertenece exclusivamente a la ins­ titución religiosa, sino que ella es el libro de todos. Es más, por 11. C onsu ltar Von der Wahrheit, Piper, 1947, 946. 12. La frase exacta de Jaspers se encuentra en la p. 501 d e Der philosophische Glaube angesichts der Offertbarung, P iper 1963.