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96 A. HAUSEN «Pero también si Job no se casara, Ni mordiera el laurel que agora muerde, Ni de paciencia fuera nuestro espejo»27. Es un final en consonancia con la afirmación introductoria del poema y trae a la memoria la interpretación de Fray Luis, llevada aquí hasta sus últimas consecuencias por Díaz de Aux, ridiculas para el lector familiarizado con el argumento del libro de Job. Al mismo tiempo, se torna más que problemática una tradición que, como la eclesiástica, convierte a su mujer en personaje principal, desorbitándolo de tal manera que su absolutización hace olvidar los tan conocidos sufrimientos, las pérdidas, la enfermedad y a los mismos incomprensivos amigos. La imagen de la «mujer fatal» condiciona también de raíz la in­ teligencia del capítulo sobre Job en la colección anónima Caractè­ res tirés de l ’É c ritu re Sainte et app liques aux M oeurs de ce s iè c le 28. La historia de Job recibe en este caso el título de «Le plus grande malheur d'un honnête homme» 29. El autor la dirige a un cierto Me- nandro, a quien desea infundir ánimos con el relato de lo sucedido a Job con su mujer. Como marco de su narración recurre a la «con- solatio», que le permite acomodarla al género epistolar tan en boga a la sazón y comunicarle vivacidad mediante frecuentes alocuciones. A semejanza de Job, Menandro había perdido hijos, salud y cuanto poseía; a todo sobrevivió, sin embargo, su esposa — y esto fue lo peor que pudo ocurrirle. El destino de Job va a reducirse aquí al de un marido infeliz, porque los sufrimientos que se acu­ mulan sobre él, le parecen los más grandes del mundo. Job se man­ tiene firme en sus constancia, y resiste a Satán, encamado en su mujer30. Dicho con las mismas palabras de esta narración, la ma­ yor de las calamidades que a un hombre pueden sobrevenirle con­ siste en «avoir une femme d’un esprit mal tourné, soit dans la pros­ périté, soit dans l’adversité»31. Y nunca faltarán — ¡al menos no en Francia!— esposas como la de Job ni maridos que hayan de cargar con el cruel destino del atribulado idumeo: «Combien... y a-t-il de Job en France, qui n’ont 27. Ib. 28. Edición utilizada: Anonimo, Caractères tirés de l’Ecriture Sainte et appliqués aux moeurs de ce siècle, Paris 1698. La obra fue objeto de varias ediciones. 29. Ib., 315-326. 30. Ib., 322. 31. Ib., 324.

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