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F. DE VILLALPANDO, PROTAGONISTA. 25 sofía peripatética, profesado un Instituto en que el más moderado trata la aplicación a este género de estudios de extravagancia y delirio, omitiendo otros embarazos y trabas de clase superior, segu­ ramente no entendería de estas materias, ni haría lo que yo, aunque tan poco e imperfecto»42. El primer trienio de estudios filosóficos a que alude fue el cur­ sado en un centro no determinado, antes de ingresar en la Univer­ sidad de Valladolid. El segundo se iniciaba en el otoño de 1759, en Madrid, convento de San Antonio del Prado, sito frente a la actual Plaza de las Cortes. Allí se incorporó al Curso que dirigía el P. Isi­ doro de Fermoselle, com o Lector en jefe, y el P. Inocencio de Matu­ te en calidad de Maestro de Estudiantes o vice-lector. Ambos in­ fluirían poderosamente en el destino de su alumno más esclarecido, cuyas dotes extraordinarias apreciaron desde el primer momento. El responsable principal de su formación filosófica se había gra­ duado de Lector en las oposiciones de 1758, resolviendo y defen­ diendo negativamente el «pique» elegido en Filosofía, a saber, U trum materia prim a sit pura poten tia ob je c tiva , et nullan habeat exigen- tiam , y también el de Teología, U trum pura creatura p c ssit satisfa- c er e d e cond igno p r o p e c ca to letali p r op r io ve l alieno, en tanto su colega y coopos itor Matute propugnaba el suyo de U trum d etu r uni- versa le a parte r e i ; en Teología había disertado sobre la cuestión In qu o con sista t efficacia gratiae, para situarla In v i quadam infa- llibiliter efficiend i c on sen sum , quam vim non habet ex se vel ex na­ tura sua, siv e ph y sic e siv e m ora liter sp e c te tu r, sed prou t su b e s t in- fallibili scien tiae m e d ia e 43. Temática y soluciones que rezuman esco­ lasticismo ecléctico, com o cuadraba al texto imperante, pues el de Gervasio de Breisach navegaba a velas desplegadas entre el tomis­ mo, el escotismo y, a veces, el suarismo, con preponderancia del segundo de esos sistemas. Y este Cu rsos, en sus dos vertientes filo­ sófica y teológica, se mantuvo de texto oficial en la Provincia apro­ ximadamente de 1749 a 1768, año en que cayó, víctima de la prohi­ bición de enseñar doctrinas «jesu íticas» com o la suprascrita de la ciencia m edia. A él se atenían en su docencia pública los Profesores, si bien privadamente acariciaran quizás otras tendencias, no ex­ cluidas las de la Filosofía moderna y las de una Teología también 42. AHN, Consejos, Ieg. 50.769, f. 5. 43. Viridario auténtico en que florecen siempre vivas las memorias de lo que pertenece al buen gobierno de esta provincia (ms. del APC, que cubre los años 1666-1815), ff. 363-364. La técnica del «pique» era la misma seguida en las Universi­ dades. Se presentaban tres cuestiones y el opositor podía picar la que prefiriera.

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