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18 G E R M A N Z A M O R A tarias lo que sucedía, y pidió dispensa del siguiente tercio del Cur­ so 1755-1756 y, sobre todo, «licencia en forma para recibir el grado de bachiller en la citada Facultad de Cánones», por tener ya gana­ dos en ella cuatro Cursos y parte del quinto. Se comprometía a pagar, com o era de rigor, los derechos estipulados en los Esta­ tutos, «en que recibiré merced». El ob je to de su instancia no era extraordinario, pues tanto los Estatutos de latín com o los de romance preveían una escolaridad de cinco años, «vel eorum maiorem partem» — años que habría que entender com o «Cursos». El Rector D. Antonio Manuel de Villanueva no tuvo dificultad en acceder a la súplica, «en atención a los motivos que él expo­ n e » 27, dispensándole del tiempo restante en Aquel Curso «para completar los cinco años prevenidos por Estatuto», y concediéndole la licencia solicitada para recibir el grado de bachiller. La ceremonia de colación tuvo lugar, según refiere el L ib ro de G rados de Bach iller en la Facidtad de Cánones, el martes 16 de diciembre de 1755, a las diez de la mañana, y lo acompañaban otros dos graduandos. Le confirió el grado el catedrático de Vísperas de la Facultad, por indisposición del decano de la misma, que lo era el Dr. Lemos, y actuaron de testigos un secretario y un bedel. Antes de recibirlo hubieron de prestar el «juramento de la Pura Con­ cepción», que Fernando, oriundo, según él creía, de una villa in- maculista por excelencia, prestaría caballerescamente. Por pres­ cripción de los viejos Estatutos había de abonar el nuevo bachiller al erario de la Universidad dos florines aragoneses, una dobla cas­ tellana al padrino, y un florín al notario y al bedel, «vel eorum iustam aestimationem». Los tres noveles bachilleres hubieron de someterse a ese tributo, que, sin duda, satisficieron en moneda de su tiempo 2S. 27. «Fernando Soto y Abastas, natural de Villalpando, diócesis de León: Digo me hallo matriculado por esta Real Universidad en la Facultad de Cánones en vein­ tidós de abril de mil sietecientos y cincuenta y cuatro, desde cuyo tiempo tengo probados y ganados cuatro Cursos, y también tengo asistido el presente tercio, como resulta de dicha matrícula, notas puestas a su continuación y cédulas de los Catedráticos, que presento y juro. Y mediante tener que hacer ausencia de esta ciudad con el motivo de tener noticia de estar mi padre enfermo y con este motivo de tener que pasar a verle, y no poder asistir el siguiente tercio = A Vm. suplico se sirva dispensarme dicho tercio y concederme licencia en forma para recibir el grado de bachiller en la citada Facultad de Cánones, que estoy pronto a pagar los derechos según Estatutos y en que recibiré merced, etc. D. Fernando Soto y Abas­ tas» (AUV, leg. 371, n. 327). 28. «En la ciudad de Valladolid, martes a las diez de la mañana, diez y seis de diciembre de mil sietecientos y cincuenta y cinco, el Sr. Dr. D. Gonzalo Melchor