PS_NyG_1974v021n003p0439_0449

E. RIVERA DE VENTOSA 44 1 naje el discurso del profesor M.F. Sciacca, en el que ponderó cómo la filosofía de Santo Tomás no es tan sólo algo peculiar para gentes de Iglesia, sino que se halla muy a la altura de las exigencias del hom­ bre laico de nuestros días, si se piensa que este doctor medieval pu­ so muy en claro la autonomía de las cosas creadas, sus derechos y su sentido del ser. La última nota para crónica fue dada en la sesión de clausura en la que de nuevo el P. General de los PP. Dominicos habló a los con ­ gresistas y con palabra emocionada les dio las gracias por su parti­ cipación y por haber mostrado a lo largo de las diversas comunica­ ciones la indiscutible actualidad del pensamiento del Aquinate. Ce­ rró el Congreso el Cardenal Ursi con unas palabras en las que ponía de relieve cómo Santo Tomás se sintió siempre en camino hacia la verdad, hacia la cual nos invita aún a todos nosotros. Aprovechó la oportunidad para proclamar que la nueva sede de la facultad de teología del mediodía de Italia llevará el nombre del Aquinate. II. En torno a la tem á tica del Congreso En la sesión de apertura el Maestro General de los PP. Dominicos centró la presentación de la temática del Congreso en torno a la tensión existente entre las exigencias del hombre a la trascendencia y las ideologías actuales que lo vinculan a la inmanencia. Para su­ perar esta tensión Santo Tomás enseña el camino que desde la expe­ riencia sensible y en vinculación con ella asciende hasta el ser divi­ no, fundamento de todo ser y el único capaz de poder satisfacer las exigencias íntimas del hombre. El Card. Garrone afirmó que la doctrina de santo Tomás enseña al hombre de hoy el gusto por el ser hasta llegar a la plenitud del Ser Absoluto. Pero igualmente Santo Tomás enseña el sentido del hombre al ponderar la inescindible unidad de alma y cuerpo con­ tra toda malsana escisión de filosofía y teología. Esto especialmente hay que tenerlo en cuenta al hacer aplicación de esta doctrina a la vida de la Iglesia. El P. Chenu aprovechó el gran marco del Congreso para exponer sus conocidas ideas sobre el human ism o cristiano, ideas ya expu es­ tas por Santo Tomás, el cual según la interpretación de Chenu, rom­ pió de forma discreta pero firme con la antropología agustiniana de rai­ gambre platónica. Vio en ello una lección para el momento actual

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz