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418 OPCIONES SOCIO-POLITICAS DE LA IGLESIA LATINOAMERICANA sión sin reno va r la s con cien cia s con el m en sa je de C risto L ib e r a ­ dor” 21. 3. C o n se cu en c ia s del c om p r om iso cristiano. E n este período de lib e ra ción y comprom iso la Ig le sia busca la fo rm a de que cada uno de su s m iembros a sum a la respon sab ilidad que le cabe en suerte. De a h í que tan to a los obispos y sacerdo tes co­ mo a los sim p les la ico s les toque u n a ta rea inelud ib le. a) La icos. Desde hace u n a s décadas y con la ebu llición c a u sa ­ da por la s e n c íc lic a s socia les la cristiandad n u ev a dio a la po lítica jóvenes d irigen tes de cuño so cia l cristian o , que hoy d irigen partido s e in clu so naciones. Pero los movim ien tos apostólicos de la ju ven tud a c tu a l se h an rad ica lizado . De n in g ú n modo sim p a tizan con la po lítica de la s lla ­ m adas dem o cra cia s c ristia n a s. Son m ucho m á s revo lu cion a rio s y con fre cu en cia , llam ado s por u n a ap rem ian te a ctiv id ad evangé lica, se comprometen con los movim ien to s m á s rad ic a le s de su s países. E sto les h a acarreado serio s disgustos con la je ra rq u ía que ponen en con­ flicto su m ism a p e rten en cia a la Ig le sia . A h í surgen la s c risis de los d irigen tes juven ile s. b) S a ce rd o tes. Lo s signos de los tiempos que nos h a cen m ás conscien tes de la s realid ad e s trág ica s, el campo de acción abierto por el V a tica n o y M edellín , h a logrado que el sacerdote y el relig io ­ so sea el secto r m ás d inám ico y comprometido de la Ig le sia . E n L a tin o am é rica son m uchos los grupos de sacerdotes ju ríd ic a o sub rep ticiam en te constitu ido s que desean camb ios rad icales. G ra n parte de ellos bu scan in clu so u n a p a rtic ip a c ió n a c tiv a en la p o líti­ ca. Y de hecho sus actu a cion e s les h a n m erecido se ria s llam ad a s a la enm ienda por parte de los nun cio s la tin o s y de la m ism a je r a r ­ quía de sus países. L o s gobiernos les h a n visto como grupos de sub ­ versión y m ucho s de ellos son buscados a ctivam en te por la p o lic ía ; otros se en cu en tran encarcelado s. De todas m an e ra s, el proceso e n ­ tab lado en la s filas del clero parece ser tam b ién irreve rsib le , y la s ten siones m uy posiblemente se ag raven en los años venideros. c) O b isp os. Lo s camb ios que exige L a tin o am é ric a en todos los 21. R . V idales , o . c ., 98.