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226 SAN EUENAVENTURA DESDE DENTRO ción son dos pa lab ras que mu tuamen te se recubren: la una, más popu lar, de rivada del verbo llamar, y la otra, más técn ica , cuyo o ri­ gen e timo lóg ico es el verbo latino vocare. Pero si ambas pa lab ras significan lo mismo, los estudios teo lóg icos y filosóficos se han po­ larizado en torno a la p a lab ra vocación. En teo log ía esta pa lab ra menta, an te todo, la voz de D ios que se deja o ir en lo íntimo del alm a para seña la rle una meta y una o rien tación . San Buenaven tu ra no es largo, pero sí muy exp líc ito y denso al hab la r de la vocación desde su visión teo lóg ica . Dos notas señala a la misma: el ser temporal y el ser exterior. Por ser temporal la con trapone a la p redestinación , acto eterno e irrevoca ­ ble de la P rovidencia divina, m ientras que la vocación se realiza siem p re dentro de la historia en la que tan to los ind ividuos como los pueblos pueden sen tir la voz de D ios que los llama. La otra nota es ser exterior. Se en tiende esta exterio ridad respecto de Dios, pues con relación al a lm a puede ser muy oculta y m isteriosa. Por esta segunda nota con trapone el santo la voca­ ción a la elecc ión . Dios elige y no p recisa m an ifestar al ex te rio r su e lección . Pero si Dios llama, la llam ada tiene que hace rse sentir de modo paten te por signos adecuados que exte rio ricen el deseo divino s. La vocación siem p re tiene un contenido. Dios llama para algo. Sob re este contenido san Buenaven tu ra no es muy exp líc ito en el Comentario a las Sentencias que acabam os de utilizar. Lo es, sin embargo , en una de sus cartas intimas. Se titula, De imitatione Christi. Al leerla a siete siglos trascurridos, so rp rendem os al santo en uno de esos momentos en que habla cor ad cor. La p a lab ra inicial Frater. y el reiterativo tuteo, afec tivam en te u tilizado , apuntan a mo­ mentos de solitario e íntimo coloquio. El tem a de la m isma es la vocación . Tex tua lm en te esc ribe el santo: “V ide ig itu r primo, a quo te vo c a v it... ad quid te vo cav it... per quam viam...”10. Estas tres dimensiones que señala aqu í el santo nos p roponen una gran pers­ pectiva del tem a vocacional. Hoy la vocación se la ana liza más desde la ve rtien te filosófica. Pud iera resum irse esta ve rtien te en el ce lebé rrim o verso de Pín- daro, tan tas veces repetido: “Sé el que eres” 11 . O rtega y Gasset, que 9. ln I Sent., d.40., a. 3, q .l ad 6 ; Op. o., t . I I p. 715b. 10. Epístola de imitatione Christi; Op. o., t . V I I Í , p. 499. 11. Piticas, I I , 131-132.