PS_NyG_1973v020n003p0401_0566

4 4 2 TRASCENDENCIA E INM ANENCIA DE DIOS EN S. BUENAVENTURA otras veces, parece referirla a la razón ¡lustrada por la f e 85; por fin, en alguna ocasión, unifica claramente ambas procedencias86. En último término, este tema presupone el de la sabiduría c ris ­ tiana. A él aludíamos en la introducción, quedando intencionada­ mente resuelto desde el comienzo de nuestro estudio. Creemos que desde dicha perspectiva debe resolverse tal problema, sin bus­ carle complicaciones indebidas. En cuanto ai origen histórico-literario, nos encontramos nue­ vamente ante un pensamiento que no puede ser considerado ori­ ginal del Seo. Doctor. Se halla dentro del contexto interpretativo del concepto de Dios como “ Id quo maius excogitan nequit” y es exigido, como éste, por la communis anim i conceptio 8?. Un análisis histórico-literario e ideológico del mismo contribui­ rá a su esclarecimiento. Desde una perspectiva noética, el término sentire puede ad­ quirir en S. Buenaventura diversos significados y matices que él mismo precisa: “ S e n t ir e p o t e s t a c c ip i c o m m u n it e r e t proprie et magis pro- prie. Communiter sentire I d e m e s t, q u o d r e m u t p r a e s e n t e m c o g n o s c e r e... Secundo modo sentire id e m e s t, q u o d r e m u t h ic e t n u n c c o g n o s c e r e ... Tertio modo sentire id e m e s t, q u o d s p e - c ie m e x is t e n t e m in m a t e r ia p r a e t e r m a t e r ia m m e d ia n t e o r - g a n o c o r p o r e o s u s c i p e r e ...” 85. Hexaem., coll. 5, n. 21: V, 357a; Ibid,., coll. 9, nn. 23.24.25.26: V, 376a; Donis, coll. 3, n. 5: V, 469a. 86. Reg. animae, nn. 1.2: VIII, 128a. 87. J.G. Bougerol hace provenir el sentire de Deo bonaventuriano de una definición agustiniana (De Trinitate, VII, c.4, n.6: PL 42,851), citada, a su véz, por S. Buenaventura en III Sent., d.24, dub.4 resp.: III, 531a: “ Et quid est Deum scire, nisi cum mente conspicere, firmiterque percipe- re?” (Cfr. Lexique Saint Bonaventure, publié sous la direction de J.G.B., Paris 1969, p. 118a). No nos parece exacta la opinión de dicho autor. S. Agustín se refiere al conocimiento de Dios. S. Buenaventura irá más lejos de dicha aprecia­ ción, como intentamos probar a lo largo del examen de dicho pensamien­ to. El texto agustiniano, aducido por el Seo. Doctor, está en otro contexto ideológico y se refiere en concreto al “ scire de Deo” . El sentire de Deo tiene, según creemos, un significado más rico y vital, que pretendemos aclarar. Sobre el origen platónico-agustlniano de la fórmula a la que nos estamos refiriendo, puede consultarse: A. Stohr, Die Trinitatslehre des heiligen Bonaventura, Münster 1923, p. 29 ; P.A. Z igrossi, Saggio sul Neo­ platonismo di S. Bonaventura. Il concetto di unità e la struttura del rea­ le come problema teologico, Firenze 1954, p. 64, nota 2. 88. II Sent., d.8. p.l, a.3, q.2 ad 4: II, 222b. Cfr. I Sent., d .l; a.3, q.l ad 2: I, 39a-b: Intelligere et sentire.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz