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E. RIVERA DE VENTOSA 39 formulaciones sintácticas que nadie sabe de qué tratan, sino sólo que lo que se dice está bien dicho, es decir, es correcto. Corrección e in­ ferencia, como descarnado pensar, y la mera existencia fáctica, sin logos interno que la clarifique, son los polos extremos del pensamien­ to logistico entre los que ha muerto toda metafísica y con ella, todo pensamiento transcendente. L.Gabriel sintetiza su juicio en estas lí­ neas: «Conocemos las abstracciones y negaciones que, en sus extre­ mos últimos, han conducido a la lógica puramente formalistica de una construcción formal de lo lógico, vaciada de sentido y suelta de todo contenido real. Con ello ha conducido expresamente a posiciones mentales declaradas «sin sentido», con signos elegidos arbitrariamen­ te según reglas de empleo y, por otro lado, a una pura y absoluta pa- tenciación de la existencia» a. Contra estas cuatro lógicas L.Gabriel ha intentado sistematizar su Integrale Logik. En la obra, aparentemente alejada del problema lógico, Mensch und Welt in der Entscheidung, nos hace sentir el mo­ mento central de la Integrale Logik de cuyo análisis, como preámbulo a la dialàgica, nos vamos a ocupar en este estudio. En un pasaje de la citada obra declara que su intento en la lógi­ ca es el mismo que ha realizado Heidegger en ontologia. Este distin­ gue entre ser y ente, distinción que implica una diferencia ontològica, según L.Gabriel. El intento de resolver el ser en el ente es lo mismo que resolverlo en el concepto. Este, sin embargo, ha sido el tema de la metafísica tradicional y su desviación más perniciosa. Por ello, es­ te camino es inviable. Parece dirigirse al ser y se encamina de hecho al olvido del ser. Pues el olvido del ser no es más que el olvido de la distinción del ser respecto del ente. Se impone, por tanto, buscar un nuevo camino, un nuevo ensayo de pensar. Este nuevo ensayo de pensamiento debe afirmar la diferencia ontològica entre el ser y el ente para mentener abierto, con esta distinción, el acceso al ser. Es­ ta debe ser la gran misión de una ontologia fundamental. La cual no será una ontologia del ente (òv), sino ontologia inobjetivable del ser ( e t v a i ) sobre el terreno de la existencia humana, inobjetivable en su libertad 22. 21. Lógica Integral..., p. 81 22. Hombre y mundo en la encrucijada..., p. 98.