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RICARDO MARIMON 2 6 7 A l fin , no pudo menos de plantearse el problema del pluralismo en la filosofía cristiana, ocasionando malestar y suscitando preocupa ciones en no pocos que creían ver en aquél un signo de debilidad fi losófica. L a voz de la Iglesia se dejó oír como de paso en la encíclica «Studiorum Ducen», de Pío X I , en la que el Papa seguía recomen dando el estudio de Santo Tom ás, como lo había hecho León X I I I y tal como se había preceptuado en el Código de Derecho Canónico (can. 1366 párrafo 2 ) en tiempo de Benedicto X V , pero con la debida l i bertad : «De tal modo sigan todos esta norma, que puedan llamarle con verdad (a Tom ás) su maestro. Pero no exijan más unos de otros, de lo que de todos exige la Iglesia, madre y maestra de todos, y en aquellas cosas de que en las escuelas católicas suele opinarse por am bas partes contrarias entre los autores de mejor nota, a nadie debe prohibírsele que siga la sentencia que le parezca más verosím il» («S tií- diomm Ducem », A A S , 1923 , p. 324 ). E n realidad, en la «Studiorum Ducem» lo mismo que en la «Aeterni Patris» no quedaba mucho lugar para el pluralismo, ya que no se recomendaba el estudio de S . Agu stín , o de S . Buenaventura, ni el de Duns Escoto o Suárez al mismo n ive l que el de Santo Tom ás de A q u in o ; y sólo se perm itía sostener aquellas sentencias escolásti cas de diverso signo, sostenidas por aquellos Maestros y por sus se guidores. E n la constitución «Deus Scientiarum Dominus», también de Pío X I , siguiendo la misma línea se d ispon ía: E n la Facultad de teolo gía tenga preferencia la sagrada teología. Esta materia se ha de en señar con el método tanto positivo como escolástico; y por tanto, des pués de exponer las verdades de la fe y demostrarlas por la sagrada Escritu ra y la T rad ición , se ha de investigar e ilustrar la naturaleza e íntima razón de tales verdades, según los principios y doctrina de Santo T o m á s ...» « E n la Facultad de Filosofía, enséñese la filosofía escolástica, y ésta de tal modo que los oyentes se formen con una sín tesis de doctrina perfecta y coherente según el método y principios de Santo Tom ás de A q u in o : y desde esta doctrina examínese y júz- guense los diversos sistemas de los filósofos». («Deus Scientiarum Do - minus », A A S , 1931 . p. 253 ). U n id a d y p l u r a l is m o t o m is t a
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